Jueza Potschka: “Me preocupa la agresión de las madres hacia sus hijos”

La jueza de Familia, Margarita Potschka indicó que por día reciben entre 10 y 12 denuncias de violencia familiar, entre ellas no sólo de hombres hacia mujeres sino también de madres a sus hijos. “Es lo que más me preocupa”, dijo. Además, advirtió: “el síntoma que yo veo es que no hablan entre ellos”.

La jueza de Familia de Eldorado, Margarita Potschka se refirió al número de denuncias que reciben en el último tiempo y señaló: “nosotros hace dos años que trabajamos en el juzgado de familia y el número se sostiene, tenemos días clave, especialmente los lunes, y un promedio de 10 a 12 denuncias de violencia familiar por día”.

 

Asimismo aclaró que las denuncias que reciben no son sólo de violencia de hombres hacia sus mujeres sino de nietos a abuelos, de hijos a padres y de las madres hacia sus hijos. “Las madres les hacen castigos psicológicos, encierros, falta de comida. Los niños son agredidos de todas maneras por sus madres, es lo que más me preocupa”, puntualizó.

 

Al respecto explicó: “hago hincapié en esto porque siempre que hay una denuncia de maltrato de un padre hacia sus hijos, queda la madre para guarecer a los hijos mientras el padre es excluido, pero cuando es la madre es todo un tema. Esas denuncias las hace  un tercero o incluso los propios hijitos. Ayer un chico de 14 años vino solito a denunciar a su mamá”.

 

En ese sentido, la magistrada destacó la difusión que hay sobre la posibilidad de ser atendidos por la Justicia en los casos de violencia. “La sociedad ha tomado conciencia, hasta los niñitos. Entonces hay casos donde los niños escapan de la casa por las agresiones y vienen al juzgado”, dijo.

 

Señaló que en los casos donde la madre es agresora, se suele tratar de una agresión sutil que tal vez no se ve hasta después de un tiempo, como el amedrentamiento. “No el golpe porque los docentes están muy atentos. Los maltratos de la madre son menos ostensibles, y es cierto que son muchos menos casos de las madres que golpean a sus hijos, la posta la lleva el hombre, pero existe”.

 

Asimismo dijo que aunque no puede aseverar que los casos de violencia aumentaron en las casas, sí aumentaron las denuncias en el juzgado. “Eso quiere decir que la gente viene más a denunciar”, manifestó.

 

 

“Emergentólogos” de la gente

 

La jueza consideró que en los juzgados que atienden casos de violencia familiar, muchas veces se actúa como “emergentólogos” ya que la ley los faculta no sólo a excluir del hogar al agresor o guarecer a la víctima sino también a decidir provisoriamente soluciones de alimentos, vivienda y atención psicológica. “Muchísimas veces implementamos los planes del Gobierno dentro de la audiencia por violencia familiar como el plan Hambre Cero, el plan Techo y el plan Nacer”, dijo y agregó: “asumimos que somos emergentológos porque no podemos excluir al hombre o al agresor y quedarnos allí, tenemos que hacer todo para que la demanda de Justicia sea satisfecha”.

 

 

El síntoma común es la falta de comunicación

 

Para Potschka, si bien no puede indicar un motivo unívoco para la gran cantidad de casos de violencia familiar existentes, se trata de un combo de múltiples factores aunque con un elemento que se repite: la falta de comunicación.

 

“Viene todo junto, el padre que toma alcohol, viene cansado, no le alcanza, le llueve el techo, tiene como un enojo porque en lugar de hablar, golpea. ¿Por qué un niño golpea a los padres o huye de casa? Es como si se hubiera perdió el diálogo, el “vení y hablemos”. En las audiencias muchas veces yo los tengo que enfrentar, insistirles que se miren”, reflexionó y añadió: “vivimos muy pendientes del celular, con el televisor encendido, la prisa… no sé a que atribuir pero el síntoma que yo veo es que no hablan entre ellos”.

 

Consideró que ese mismo síntoma es raíz en el bullying escolar y señaló: “hay bullying en la escuela porque adentro de la casa también hay agresión, hay una reacción rápida porque les cuesta mucho hablar entre sí. Cuando yo los hago vincularse, que se den un abrazo, el niño se quiebra, la mujer se quiebra”.

 

Además indicó que otra cosa que muchas veces surge en las audiencias por violencia familiar es el abuso sexual intrafamiliar. “Allí trabajamos inmediatamente con los juzgados de Instrucción, pero es una situación que se da porque muchas veces toda la familia vive en un solo cuarto, entonces el Consejo de Garantía de los municipios me hace una pared, otro baño…”, manifestó.

 

Respecto a esto último se mostró optimista y destacó: “yo creo que los juzgados tenemos herramientas, porque trabajamos en red con el Consejo de Garantía de los municipios, que es como una defensa civil de los niños y niñas, y la gente sabe que puede venir”.

 

“Soy muy optimista en cómo estamos trabajando pero es cierto que no alcanza y eso angustia”, reclamó finalmente en declaraciones a Radio República.

 

 

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas