La primera mujer en conseguir su propio escaño en la Bolsa de Valores de Nueva York le dejó una gran tajada de su herencia a su perra chihuahua, que deberá ser cuidada con todos los lujos.
Muriel ‘Mickie’ Siebert falleció el 24 de agosto a la edad de 84 años y separó 100 mil dólares en su testamento para el cuidado de su perra, Monster Girl. La mascota quedará ahora bajo el cuidado de la amiga de Siebert Lynda Fox-Frazer.
“Solicito que mi perra no se quede sola por largos períodos de tiempo durante el día”. Siebert escribió en su testamento, el cual fue presentado en la Corte testamentaria de Manhattan.
Siebert nunca se casó ni tuvo hijos. El único miembro de su familia que le sobrevive es su hermana Elaine Siebert, a quien le dejó 1.5 millones de dólares en un fondo fiduciario.
El bienestar de los animales era una causa muy estimada por Siebert, por lo que apartó 10 mil dólares para ser donados al Centro Médico para Animales en Manhattan.
Siebert estipuló que el dinero debe ser donado mientras Monster Girl se encuentre con vida.
