El desafío de no revictimizar en el eje de la discusión del Poder Judicial

Especialistas de diversas áreas analizaron la problemática social y judicial.

Especialistas de diversas áreas analizaron la problemática social y judicial.

Posadas es la sede de las V Jornadas Nacionales de Asistencia a la Víctima donde abogados, magistrados y funcionarios analizan los procesos de acceso a Justicia en los distintos distritos del país. Las distintas experiencias sobre los programas de protección y atención a víctimas de diferentes delitos. 

Los procesos judiciales y el capacidad de respuesta que tienen las distintas jurisdicciones para atender a las víctimas de delitos son el eje del V Encuentro Nacional de Asistencia a la Víctima que se realiza hasta hoy en Posadas. La perspectiva de género, los distintos protocolos para asistir a personas víctimas de violencias y la compleja temática de la niñez centran la atención en las distintas exposiciones que se desarrollan en el hotel Maitei. Ayer además de presentar los programas de asistencia y mecanismos de resorte con los que cuenta el Estado nacional y provincial se brindaron detalles de los procesos cotidianos como también la necesidad de sincerar aspectos relacionados a la estigmatización de los menores por parte de los medios de comunicación y la necesidad de desarrollar la perspectiva de género para mejorar el servicio de justicia.

 

 

El primer panel del encuentro organizado por el Consejo Federal de Oficinas de Asistencia a la Víctima de Delitos contó con la disertación de  Kevin Lehmann, vocero del Colegio de Magistrados y Funcionarios del Poder Judicial de Buenos Aires. Habló del desajuste temporal entre el Poder Judicial y el suministro de Justicia.

 

 

Entabló los desafíos de los desajustes sistémicos entre las expectativas sociales versus los recursos jurisdiccionales cuando por ejemplo en un juzgado de Familia de La Matanza se contabilizaron en 11 meses 3164 causas de las cuales  1911 requerían de medidas de protección contra la violencia familiar, dando cuenta que es realmente imposible que se imparta Justicia cuando humanamente no puede responderse de la forma adecuada sin hacer las entrevistas ni tomar los recaudos necesarios para una justa decisión.

 

 

Hizo un párrafo aparte para dar cuenta de las fallas en lo que respecta al Poder Judicial en cuanto a la toma de decisiones, la imposibilidad de controlar o definir las leyes- potestad del Poder Legislativo – y la realidad que se plantea cuando no da justicia absoluta y que ello deviene en defraudación.

 

 

 

Niños versus Menores

Al entablar el tema del debate sobre la necesidad de bajar o no la edad de imputabilidad a 14 años, hizo una descripción de cómo el sistema judicial interviene en los casos donde son los menores los que cometen delitos.  Allí sostuvo que cuando se tratan estos temas la mitad de la sociedad está en contra de medidas duras y la otra a favor.

 

 

A su criterio en el Poder Judicial y la sociedad se debe tener en claro que cuando hay un menor cometiendo un delito se identifican claramente dos víctimas, el que comete el delito y quien es afectado por el hecho. Con 5 millones de causas que ingresan por año en el Poder Judicial de las cuales 2 millones son penales, sostuvo que no hay forma de que se resuelvan sin mora y con los estándares de calidad esperados.

 

 

«La ley para que los menores no cometan delitos es la de Presupuesto y no la que fija la edad de imputabilidad», dijo y explicó cómo hasta desde el lenguaje se hace una diferencia cuando se habla de niños o de menores. Los menores son peligrosos, los que se drogan, los que delinquen y los que matan, mientras que los niños son «nuestros hijos o los amigos de nuestros hijos».

 

 

A su criterio se despersonaliza cuando se sigue trabajando con la teoría de que «los menores no son niños» y en eso recaló en los desajustes sociales donde también hay fuerte colaboración de los medios de comunicación. Lehmann indicó que en materia de medios se trabaja en dejar de estigmatizar a los jóvenes o adolescentes que están imputados en hechos delictivos como también en erradicar los discursos simplificadores acerca de las causas. En este sentido ejemplificó que cuando se habla de las causas se dice que es culpa del consumo de paco, de la falta de educación o de la exclusión social, en un recorte que invalida otro tipo e análisis.

 

 

Como desafíos planteó la necesidad de que la Magistratura participe en la construcción de las soluciones, que se convierta a la perspectiva de género en una política transversal del Poder Judicial, hacer públicas las decisiones jurisdiccionales para ajustar las expectativas ciudadanas.

 

Equidad de Género

 

Diana Maffía, del Observatorio de Genero del Poder Judicial de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires disertó sobre políticas públicas para la equidad de género, doctora en Filosofía, planteó que hay que tener en cuenta las fronteras geográficas y culturales a la hora de dar voz a las víctimas. En ello describió que en muchos casos el encuentro con una víctima, ya reducida a una condición traumática, convierte en esas fronteras permeables en un muro inquebrantable.  Reflexionó sobre los modos de ver al otro ejerciendo un papel donde pueda lograrse un lenguaje común sin necesidad de que uno subordine al otro.

 

 

Maffía indicó que cuando se piensa en el otro se lo categoriza bajo la concepción de ciudadanía, donde en lo público interviene el Estado y en lo privado se reserva a la familia.  En esta división entre lo público y lo privado definió los diferentes roles de los hombres y las mujeres como también las cualidades exigidas socialmente para cada género, en especial lo referido a la propiedad patriarcal. “La idea de propiedad todavía es un pensamiento fuerte que opera en modos de que pone en riesgo la situación de las mujeres.  La ciudadanía estaba pensada desde los ideales de la Revolución Francesa con la fraternidad, la libertad y la igualdad como términos que no estaban pensados para ellas”.

 

 

“Cuando pensamos en políticas de género estamos hablando de igualdad de oportunidades y trato para hombres y mujeres.  Implica que todas las áreas del Estado se compromete a crear áreas integrales de desarrollo económico, de viviendas y de educación que propendan a la igualdad de oportunidades y de tratos entre mujeres y hombres”, dijo.

 

 

Se busca el equilibrio entre varones y mujeres. Para la funcionaria es crucial la posibilidad de que los sujetos tengan las mismas libertades sea cual fuere su condición social, sexual y económica. Lo otro esencial para las políticas igualitarias de género es el reconocimiento social que se da a través de políticas culturales con una inclusión explícita de los que hoy están excluidos.  Redistribución, reconocimiento y representación.

 

 

Hoy Misiones

 

En la jornada de hoy el ministro de Derechos Humanos de la Provincia, Edmundo Soria Vieta presentará junto a su equipo la asistencia que se le brinda a las víctimas de trata con la articulación de los diferentes programas del Estado y la posibilidad, única en el país, de que las víctimas de este delito puedan acceder a una beca que las ayuda a reintegrarse socialmente. También habrá un panel sobre la incidencia de los Medios de Comunicación en la Justicia y el cierre del encuentro será una clase magistral sobre Funcionalidad y conflictividad del derecho de la víctima a cargo de Luis Francisco Lozano, presidente de la Junta Federal de Cortes y Tribunales de Justicia de las provincias Argentinas  y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. 

 

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas