Unas 5 mil familias viven en Posadas en asentamientos ilegales

La municipalidad identificó treinta predios ocupados. Estiman que para solucionar el déficit habitacional haría falta una inversión de entre dos y tres mil millones de pesos. Priorizan la regularización en casos en que la ocupación date de más de 10 años


Jorge Atencio – Municipalidad de Posadas

Jony, Elizabeth y María – ocupantes de terrenos en la zona del Acceso Sur.

La municipalidad de Posadas tiene registrados unos treinta predios que están ocupados por familias que instalaron allí sus viviendas. La mayoría son terrenos privados, aunque también se registran casos en terrenos fiscales y calles. Aseguraron que se avanza para regularizar la tenencia de la tierra en casos en los que se pueda acreditar una ocupación de más de diez años. Advierten por el rápido crecimiento de este fenómeno en las tierras lindantes al flamante Acceso Sur.

Jorge Atencio, coordinador de Tierras Fiscales y Agua del municipio, habló sobre el procedimiento que se aplica con los ocupantes. “En lo que se hace énfasis desde la coordinación es comenzar a trabajar en aquellos asentamientos que existen en espacios públicos, avenidas, calles o veredas, que datan de 10 años o más. La idea es comenzar a regularizar estas situaciones y no tanto las recientes”, señaló.

El funcionario municipal que comanda el área desde su creación hace poco más de un año, manifestó que “hay que recordar que hace 10 o 15 años los servicios no llegaban a muchos lugares de Posadas. No avanzaban las obras de infraestructura y había espacios grandes que no estaban identificados catastralmente ni por el propio dueño y la gente los fue ocupando”.

El funcionario advirtió que en muchos casos, los dueños no hicieron nada con los terrenos y se limitaron a especular con que las propiedades se valoricen con el avance de la infraestructura, años después se acercaron y se encontraron con que sus terrenos estaban intrusados. “Nosotros a pesar de que podemos buscarle toda la buena intención, no tenemos la potestad para trabajar sobre lo que es privado, pero sí trabajamos en muchas chacras donde hemos regularizado y se ha relocalizado a la gente, de forma ordenada”, señaló.

Posadas tiene hoy según el municipio unos 30 asentamientos donde viven unas cinco mil familias. Sobre el trabajo realizado Atencio dio un ejemplo: “se terminó de regularizar esta semana las parcelas 44, 45 y 47 de Miguel Lanus, unas 287 familias, ahí muy cerca de donde se están dando las ocupaciones recientes”

Ante el reclamo de solución urgente por parte los intrusos Atencio indicó que “la gente debe comprender que se necesitarían unos 2 o 3 mil millones de pesos para hacer viviendas para todas esas familias, y que eso no es mágico”.

 

En el Acceso Sur a pocos metros de la toma de agua de Miguel Lanus se registraron los asentamientos más recientes de intrusos, tanto del lado de Garupá como de Posadas. Un arroyo, el “Laguna”, divide los municipios, pero la ocupación se dio en el mismo tiempo entre abril y mayo, en ambos lugares.

Cientos de familias o jóvenes que buscan independizarse, tomaron terrenos en donde en la mayoría de los casos construyeron precarios ranchitos hechos con madera, chapas de cartón, polietileno o lonas, y en otros incluso viviendas de material. En lo que si se parecen todas, es que grandes y chicos utilizan baños tipo letrina, más  precarios aun.

Es el caso Jony de 18 años, quien vivía junto a su madre y sus siete hermanos en el barrio A 4 pero que decidió hacer su vida, y no encontró mejor manera que ocupando un terreno exactamente en el límite de los municipios. “Yo tengo que dormir acá todos los días porque ya quiero tener un lugar, quiero zafar de mi casa” contó. Y además dijo que si no hay nadie en el terreno, vienen otras personas y lo ocupan e incluso lo venden. El joven dijo también que su deseo es trabajar para comprarse las cosas que necesita y tener una vivienda.

Joni explicó que llegó al lugar casi de casualidad: “yo pasaba por acá en bici y vi que la gente estaba entrando, habían unos policías cuidando el terreno que está pegado a este. Les pregunté a ellos si se podía agarrar un lugar y me dijeron que estaban poniendo un cerco, (para delimitar un terreno) pero que agarre el terreno de a lado”.

El joven duerme en un ranchito de 1.5 metros por 2 metros hecho con plásticos y maderas muy precario, expresó: “yo estoy con ganas de plantar algo acá, y en la casa de mis viejos con mi trabajo compre un compresor. Lo quiero traer y como este lugar está cerca de la ruta, quiero poner una gomería o un lavadero”

Muy cerca pero ya pasando el arroyo Laguna en el municipio de Garupá, Elizabeth, una señora de unos cincuenta años trabajaba la tierra del terreno que ocupó junto su hija y nietos, “estoy haciendo una huertita para aprovechar la tierra, acá no se acercó ningún político ni tampoco el dueño, y nosotros vamos a venir a vivir acá porque no tenemos terreno”

La mujer advirtió: “acá la gente no va a salir, acá ya tienen sus casitas, así que sería lindo que nos traigan el agua y la luz, porque los que están acá, están como perritos tirados, nadie los viene a ver”.

Y siguió: “la mayoría son gente que alquilaban, y ya no tienen para pagar”. En ese sentido puso como ejemplo a una vecina que vive a pocos metros en otra casilla: “ahí hay mujeres con niños, no tienen agua ni luz, si ellos tenían donde vivir, no van a vivir como están viviendo acá, con lluvia y frío.  Acá hay personas que están esperando una casa del Iprodha hace 20 años”.

Por último María  que también vive hace cerca de un mes en la zona del Acceso Sur, contó que estaba alquilando hacia ocho años, pero ya no les alcanzaba para seguir pagando. Antes vivía en Ñu Porá, pero ahora con su hijo, su nuera y nietito de 10 meses viven en una precaria casilla.

“Estamos esperando que van a hacer con nosotros, si vamos a seguir quedándonos acá, o que van a hacer, pero alquilar no podemos más. Acá casi el 90% de la gente no tiene trabajo, hay muchas criaturas en el lugar”.

María hizo referencia a lo que también ocurre en los terrenos tomados: “hay gente que agarra el terreno, lo cuida pero no hace nada en el, porque dicen que va a valer mucho, y algunos lo venden por dos mil o tres mil pesos”

 

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas