El Colegio de Ingenieros Forestales de Misiones aprobó el nuevo Código de Ética que, en adelante, regirá para los profesionales matriculados. “Desde la conformación del Colegio y hasta la fecha se utilizó como referencia de acción el Código de Ética del Consejo Profesional de Arquitectura e Ingeniería. En adelante avanzamos con un Código propio de la profesión y constituye un compromiso de honor para quienes ostentan el título de Ingeniero Forestal en Misiones”, explicó el presidente del Coiform, Hernán Patzer.
En el marco de la Asamblea Extraordinaria realizada el pasado 29 de junio del corriente año, el Colegio de Ingenieros Forestales de Misiones (Coiform) aprobó el nuevo Código de Ética que, en adelante, regirá para los profesionales matriculados.
La reunión se llevó a cabo en las instalaciones de la sede del Inta Eldorado y el documento de referencia recientemente aprobado fue presentado por el Consejo Directivo como el resultado de un trabajo desarrollado con la fundamental participación de los matriculados.
“Desde la conformación del Colegio y hasta la fecha se utilizó como referencia de acción el Código de Ética del Consejo Profesional de Arquitectura e Ingeniería. En adelante avanzamos con un Código de Ética propio de la profesión y constituye un compromiso de honor para quienes ostentan el título de Ingeniero Forestal en Misiones”, explicó el presidente del Coiform, Hernán Patzer.
Con respecto a la redacción del documento, agregó que el Código contiene criterios y conductas para el ejercicio profesional en el marco de responsabilidad y dignidad que la sociedad demanda, como también de un respeto irrestricto a los principios del desarrollo sustentable. Es decir, abarca aspectos relacionados a la responsabilidad social (opiniones públicas, honorabilidad, competencia, comportamiento), ambiental, y de la práctica técnica y profesional (su relación frente a sus pares, empleadores, clientes y subordinados), contemplando además incompatibilidades, falta de ética y denuncias, estableciendo procedimientos para infracciones y sanciones –en el caso que sean necesarios- cuyo análisis será competencia del Consejo Directivo y un Tribunal de Disciplina.
Patzer consideró que, por medio del ejercicio profesional, los Ingenieros Forestales asumen una particular responsabilidad con la sociedad, el ambiente y la profesión, comprometiéndose a orientar su acción según los principios éticos y de conducta que rigen la profesión y que se resumen en el Código de Ética aprobado recientemente.
“El Coiform tiene como objeto esencial promover la racionalización, el desarrollo, el prestigio y la protección del ejercicio de la profesión del Ingeniero Forestal, y apunta a constituirse en todos los niveles jurisdiccionales, en una voz representativa del pensamiento y accionar de sus colegiados ante la opinión pública y las más diversas formas de organización social, contribuyendo con ello al desarrollo integral del sector forestal y de la comunidad”, concluyó el presidente de la institución.
