El Gobierno del estado de Paraná (Brasil) y las empresas participantes presentaron formalmente el proyecto en el municipio de Capanema. Los trabajos comenzarán en julio y se invertirán 1.600 millones de reales. La central se ubicará a unos 100 kilómetros aguas arriba de las Cataratas.
El Gobierno de Paraná, la empresa Neoenergia y la Compañía Paranaense de Energía (Copel) anunciaron esta tarde el inicio de las obras de la central hidroeléctrica Baixo Iguaçu, ubicada sobre el río Iguazú, entre los municipios de Capanema y Capitão Leônidas Marques. La usina se ubicará a unos 100 kilómetros de las Cataratas y a menos de un kilómetro del Parque Nacional Iguazú, de Brasil. La inversión total fue estimada en 1.600 millones de reales, algo más de 700 millones de dólares.
La usina tendrá una capacidad de 350 megawatts suficiente para atender el consumo domiciliario de un millón de habitantes. Está previsto que las obras comiencen en julio y que den trabajo en forma directa a unas 2.500 personas. “Es uno de los emprendimientos más significativos, frente al creciente consumo de energía en Brasil”, indicó el director de Medio Ambiente y Ciudadanía Empresarial de la Copel, Jonel Iurk, durante el anuncio realizado en el Centro de Exposiciones de Capanema.
El impacto de la usina en la región fue destacado por la directora-presidente de Neoenergia, Solange Ribeiro. “Este emprendimiento significa progreso, movimiento en la economía y desarrollo”. Ribeiro destacó además la asociación con la Copel lo que le otorga previsibilidad al emprendimiento.
Aseguraron que los municipios de Capanema y Capitão Leônidas Marques que tendrían áreas afectadas por la construcción de la usina, serán directamente beneficiados con un aumento en la recaudación de impuestos y la generación de empleos. Además de eso, cuendo comience a generar energía, la usina va a pagar una compensación financiera por el uso de los recursos hídricos aumentando los recursos de los municipios.
“Es la mayor obra en nuestro municipio, espera hace más de diez años y ahora se vuelve realidad gracias al gobierno de Paraná” afirmó la jefa comunal de Capanema, Lindamir Denardin. “La construcción de la usina va a crear empleos y ayudar al desarrollo de la región”, afirmó
En diciembre último la Copel inauguró la Usina Mauá que está ubicada en los municipios de Telêmaco Borba y Ortigueira y tiene una capacidad de 363 megawatts. En las próximas semanas será inaugurada la PCH Cavernoso 2, ubicada entre los municipios de Virmond e Candói, con 19 megawatts de potencia. Juntas, Baixo Iguaçu, Mauá e Carvernoso 2 suman 3.420 millones de reales en inversiones, alrededor de 1.500 millones de dólares, desembolsos realizados íntegramente en el estado de Paraná.
Afirman que el impacto ambiental será mínimo
Quienes tendrán por tarea la construcción de la represa, afirman que el impacto ambiental que tendrá será mucho más bajo al de estructuras con similar capacidad de generación.
Se levantará un muro para contener un reservorio de agua que no superaría los 31,6 kilómetros cuadrados de superficie. El lago de la Baixo Iguaçu será operado “a hilo de agua”, lo que significa que no necesitará un gran volumen hídrico para funcionar, lo que minimizaría los impactos ambientales.
Baixo Iguaçu será el último emprendimiento energético previsto por el gobierno de Paraná sobre el río Iguazú, sobre ese curso de agua ya operan otras cinco centrales de gran porte: Foz do Areia, Segredo, Salto Caxias – todas de la Copel – además de Salto Osório y Salto Santiago, pertenecientes a Tractebel. Juntas, totalizan 6.674 megawatts de potencia instalada.
