A unos 700 metros de la ruta 105, apareció el cuerpo del olero de 60 años enterrado en una zona de basural y malezas.
En el patio de su casa, en Garupá, hallaron enterrado a Juan Álvarez (60). Presentaba un corte en el cuello y tenía golpes en la cabeza. Había desaparecido hace un mes. Permanece prófuga una mujer de 53 años, la «novia» del entrerriano de 28 años detenido como principal sospechoso.
La angustiosa búsqueda de Juan Carlos Álvarez terminó de la peor manera, encontraron su cuerpo sin vida y enterrado en el patio de su casa en el barrio Don Claudio de Garupá. Tenía golpes en la cabeza y un profundo corte en el cuello. Un entrerriano de 28 años, quien convivía con la vícima y habitualmente mantenía atemorizado a los residentes de la zona, está detenido como principal sospechoso.Álvarez iba con frecuencia a visitar a su hermana Adelaida en el barrio Villalonga de Garupá, también visitaba a otros familiares de Candelaria. La última vez que lo vieron fue en Semana Santa, y desde entonces no supieron más nada de él.
Desaparición y muerte
Después de varios días de búsqueda, a fines de abril se radicó la denuncia ante la comisaría de la Mujer de la Unidad Regional 10. El martes a la tarde alrededor de las 16:30, vecinos del barrio Don Claudio, quienes también lo buscaban por la zona, sintieron malos olores provenientes del patio trasero de la casa. Después de ingresar al predio encontraron con el cuerpo de Juan semienterrado, con el torso desnudo, en descomposición. De manera inmediata avisaron a la seccional 5° que tiene jurisdicción en el lugar y cuyos efectivos llegaron al sitio mencionado junto al juez en turno, Marcelo Cardozo. Tras el examen médico se conoció que hacía aproximadamente 20 días que llevaba muerto, de igual manera los restos fueron trasladados a la morgue para autopsia.
El entrerriano
“Es un tipo jodido y vivía drogado”, así un vecino describió a Jorge Almada (28), el hombre oriundo de Entre Ríos que hacía tres meses llegó a trabajar con la víctima.El ahora detenido, era el que más horas pasaba junto a Álvarez. Creen que podría tener alguna vinculación con el crimen, más aún teniendo en cuenta su fuerte personalidad y su conducta amenazante. “Ahora entiendo por qué este hombre le amenazó a otro diciéndole, te va a pasar lo mismo que a Álvarez”, agregó el vecino que no quiso dar su identidad.
“Se me fue un compañero”
Adelaida dialogó con Misiones On Line, y recordó a su hermano Juan Carlos como un trabajador que “no tenía problemas con nadie y siempre me venía a ver. Últimamente se quedaba más tiempo en su olería, se quedaba a dormir ahí, y lo perdí de vista a mi verdadero compañero”.El sexagenario no manejaba mucho dinero, pues su actividad no era muy rentable, de todas maneras no descartan un homicidio con fines de robo.
Olero de Garupá fue atacado con hacha y machete antes de ser degollado
