Beatriz de Holanda ofreció, ayer, una cena de gala en el Rijksmuseum, en Ámsterdam.
Máxima Zorreguieta apareció junto Beatriz en la entrada del museo Rijksmuseum ataviada con un vestido rojo con volantes plisados, que adornó con un chal del mismo tono y un colgante con el diamante Stuart, una joya de la casa real holandesa.
El vestido fue confeccionado por el modista italiano Valentino. La reina Beatriz eligió un vestido en brocado plateado de dos piezas y una capa negra ribeteada de piel para protegerse de las temperaturas aún invernales de Holanda.
En esta cena de gala, participaron príncipes y princesas de las casas reinantes europeas de España, Bélgica, Luxemburgo, Noruega, Suecia, Dinamarca, Reino Unido y Mónaco.
Felipe de Borbón y su esposa Letizia; el príncipe Carlos de Inglaterra, heredero del trono británico, y su esposa Camila; y Alberto II de Mónaco, entre los invitados.
Naruhito, el heredero nipón, acudió solo. Lo acompañaron a su llegada la heredera sueca, la princesa Victoria, y su marido Daniel.
