Gabriela De Melo Silva (23), de nacionalidad brasileña, sobrevivió de milagro. Ayer a la tarde cuando volvía de Encarnación a Posadas, en un automóvil guiado por su hermana, de repente se bajó del rodado, atravesó las barandas del puente internacional San Roque González de Santa Cruz y se tiró al río Paraná. Al salir a flote, la joven que intentó suicidarse fue rescatada por un pescador. Luego la Prefectura Posadas la asistió y la derivó al hospital Madariaga.
Ayer alrededor de las 16:30, Gabriela y su hermana Esther Hentles emprendieron regreso al lado argentino desde Encarnación donde habían realizado unas compras. La chica de 23 años, con antecedentes de consumo de drogas, le venía manifestando a la conductora del vehículo los problemas que venía atravesando.
No dio indicios de intentó de suicidio hasta las 16:50 cuando imprevistamente gritó “yo me quedo acá”, se bajó del auto para atravesar las barandas del puente y arrojarse a las aguas del Paraná. En ese tramo hay una profundidad de unos 10 metros.
Cuentan que la chica se sumergió, salió a flote y fue rescatada por un pescador identificado como Juan Alberto Gauna, quien estaba a bordo de su embarcación “Sapucay II”.
Sana y salva
Gracias a la rápida de reacción de “Pantera”, la joven en todo momento estuvo sana y salva y fue asistida además por la Prefectura Naval Argentina que la derivó al hospital Ramón Madariaga donde permaneció en observación. Intervino el juzgado de Instrucción Nº 1 de Posadas ordenó que la víctima sea atendida en un instituto psiquiátrico. Trascendió además que hace poco tiempo la chica tuvo problemas de salud a causa de las drogas.
