Once piqueteros fueron detenidos hace minutos después de resistirse a un desalojo de la ruta que volvieron a cortar pasadas las 21. Con dos kilómetros de cola de ambs lados, la Policía intentó levantar el corte, pero los manifestantes -que no pertenecen al grupo que fue desalojado de una propiedad privada- amenazaron con machetes y foizas a los efectivos, para después agredirlos con piedras. Hay un oficial y un suboficial heridos después del avance policial, mientras que los piqueteros huyeron a un monte. Los automovilistas, por su parte, terminaron aplaudiendo el accionar policial.
Once piqueteros fueron detenidos anoche después de protagonizar un enfrentamiento con la Policía que pretendía desalojar un corte de ruta. El hecho ocurrió pasadas las 21, cuando un grupo de 50 manifestantes bloqueaba la ruta 17, en Pozo Azul, en protesta por el desalojo de unas 25 familias de ocupantes de una tierra privada, que fue ordenado por la Justicia provincial.
Cuando la Policía intentó liberar el tránsito en virtud de la extensa fila que se estaba formando, fue recibida con pedradas y amenazas con machetes y foisas.
Hubo un oficial y un suboficial heridos en la refriega, mientras que once de los manifestantes fueron detenidos, mientras que el resto se refugió en el monte. Después del encontronazo, cientos de automovilistas aplaudieron el accionar policial.
Desalojo
El conflicto se suscitó por una orden judicial del Juzgado de Instrucción 3 de San Vicente, que ordenó el desalojo de los ocupantes de unos 25 lugares de la propiedad de Colonizadora Misionera, en Pozo Azul.
Los desalojos comenzaron a las 5 y estaban impulsados contra personas que habitaban rudimentarias construcciones ubicadas en el Paraje Puente Alto de Pozo Azul, ubicado sobre la ruta provincial 17, entre Eldorado y Bernardo de Irigoyen. Las fuerzas de seguridad actuaron por orden del juez civil de San Vicente, Demetrio Cuenca, en calidad de subrogante del juzgado de Instrucción 3 de la misma localidad. Muchos de los ocupantes fueron trasladados a San Pedro y Bernardo de Irigoyen y un grupo decidió permanecer en la zona, sobre la ruta provincial 17.
Según fuentes policiales, estos ocupaban parte de la calzada como medida de protesta.
Sin solución
Ayer la policía de Misiones comenzó con el desalojo de unas 50 familias que habían intrusado 10 mil hectáreas, propiedad de Colonizadora Misionera, en Pozo Azul. Al respecto, Edgar Castro, abogado de la empresa desde 1982 señaló en diálogo con Misiones On Line que “nosotros tratamos de negociar con los intrusos antes de iniciar las acciones. Incluso les hemos presentado un plan en donde les pedíamos que se queden con una zona ellos y la otra nos dejen a nosotros, pero no hubo caso. Fue imposible y ahora exigimos el cumplimiento de la ley”.
En cuanto al intento de negociaciones, Castro agregó que “el Estado se tomó un tiempo para negociar con ellos y que salgan en paz y tranquilos, pero no hubo caso, por eso lamentablemente llegamos a estas instancias de desalojo”.
En la misma línea, Francisco García, presidente de la firma Colonizadora Misionera expresó “hay unos 150 o 200 efectivos de la policía trabajando en el lugar desde esta mañana (por ayer) para ejercer la orden del juez que tiene que ver con el derecho a la propiedad privada”.
Y añadió “se está desalojando a las personas que intrusaron nuestras tierras”.
El abogado de la firma también contó “estas personas destruyen la selva, hacen rosados para sus chanchos y algunos plantan maíz, otros tabaco, venden la madera que no es de ellos sin guías y sin plan porque al no ser la propiedad de ellos no pueden tener un plan. Y todo lo hacen sin ningún control ni multas por el apeo ilegal del monte nativo. Ahí no importan la protección del medio ambiente, las especies nativas en peligro de extinción y demás, nada importa, hacen lo que quieren”.
“Pero yo como privado por ejemplo no puedo transportar un pie de madera sin la guía, yo como privado soy sancionado si hago las cosas que hacen ellos. Y lo peor de todo es que cada vez se mete más gente y más depredación del monte hay. Es un problema grave y muy serio”, indicó. Y con respecto a lo que pretenden hacer con las 10 mil hectáreas en conflicto, Castro adelantó “Colonizadora Misionera es una empresa que se dedica a la actividad forestal y estamos con un plan de desarrollo para plantar yerba mate, para incluir ganado en las forestaciones y reforestar, pero no se puede hacer nada donde hay intrusos, porque te roban, te rompen, te hacen daño todo el tiempo. No se puede hacer un plan sustentable donde hay intrusos, eso todo el mundo sabe”. El abogado finalizó “esperemos que lleguemos a una solución para todos y que se siente un precedente de que el derecho a la propiedad privada se cumple también en este país”.
