Otras cinco víctimas de explotación laboral fueron rescatadas en Posadas. Sus empleadores fueron detenidos. Todos son de nacionalidad colombiana.
Los colombianos fueron detenidos acusados de explotar laboralmente a cinco personas de la misma nacionalidad, una de ellas menor de edad, y a su vez por lavado de dinero. Hubo tres nuevos allanamientos en 28 horas, realizados por la Policía Federal.Volvió a quedar al descubierto la insensibilidad de empleadores colombianos, quienes con promesa de buena remuneración y una vida digna, reclutan a hombres y mujeres de la misma nacionalidad quienes al llegar a Posadas se encuentran con todo lo contrario.En esta ocasión hubo tres nuevos allanamientos, uno se realizó en las inmediaciones de López y Planes y Aguado. En dos días fueron rescatados cuatro hombres mayores de edad y un jovencito menor de edad.Todos trabajaban casi las 24 horas del día, llevando pesados carros con muebles para la venta o bien en la carpintería.
Lavado de dinero
Los colombianos de a poco fueron extendiendo la bandera del préstamo informal de dinero en Posadas y toda la provincia. Desde el año pasado la Justicia Federal siguió sus pasos investigando la procedencia de la excesiva cantidad de divisas que manejaban las redes de prestamistas y concluyó estableciendo que había lavado de dinero.En esta oportunidad, los dos detenidos llevaban consigo la suma de 20 mil pesos y a su vez fueron confiscados sus bienes.Pero la suma en cuestión no es la utilizada como parámetro para la investigación, sino aquella decomisada semanas atrás en el barrio Las Rosas.Aquella vez fueron detenidos tres explotadores, quienes además administraban más o menos diez mil pesos y cerca de la misma cantidad en dólares, además de una suma de las otras monedas como pesos colombianos y bolívares venezolanos que estaban en cajas.
Ya rescataron a 20 víctimas este año
Sumado a los operativos anteriores son veinte los colombianos rescatados en 2013. En dos allanamientos en el barrio Las Rosas de Posadas, la Policía Federal rescató a por lo menos quince personas de nacionalidad colombiana que eran explotadas, fabricando y vendiendo muebles, por tres empleadores de la misma nacionales quienes ya fueron detenidos. Las personas que fueron liberadas vivían en un total hacinamiento en un inquilinato de la zona mencionada y durante las 24 horas trabajaban a cambio de sueldos, que no eran aquellos que le prometieron al dejar su país. Los investigadores, al mando del juez federal Ramón Claudio Chávez, estiman que lograron desarticular una asociación ilícita millonaria, porque con el dinero en negro, hacían préstamos con todas las facilidades y cobros diarios, semanales o mensuales.
