Por convocatoria del padre Obispo Monseñor Juan Rubén Martínez, la Junta de Educación Católica y la scretaría Episcopal para la Educación, de la Diócesis de Posadas, organizaron el segundo retiro de equipos de conducción de escuelas católicas, orientado a representantes legales e integrantes de equipos de conducción de instituciones educativas.
El encuentro tuvo por lema “En el marco del Bicentenario reafirmamos nuestra Identidad y Misión. Señor, si tu lo dices, echaré las redes. (Lucas 5, 5.)”. Se realizó el viernes 22 de marzo, en el Centro de Espiritualidad de Loreto, ubicado frente a la reducción jesuítica homónima. Oportunidad en la que se rezó y meditó cómo vive cada uno la fe.
En su conferencia, Monseñor Martínez reflexionó sobre su carta pastoral de cuaresma titulada “La fe y las obras” que comienza con la cita bíblica de Santiago 1, 18; “Muéstrame si puedes, tu fe sin las obras. Yo en cambio, por medio de las obras, te demostraré mi fe.”
Introdujo al tema resaltando que “evangelizar es humanizar”, con valores para transmitir la cultura. Acerca de la fe manifestó que “es un don de Dios y es un camino”. También se interrogó acerca de ¿cómo se acompaña desde la pedagogía a la fe?
El Obispo destacó que quienes desempeñan cargos de conducción deben tener madurez en el don de la fe para guiar y dirigir, “la fe tiene que impregnarnos en nuestros criterios, en nuestro obrar”.
Resaltó que “el secularismo es un desafío de esta época”. Lamentó que se observa a “muchos cristianos que padecen una ruptura entre fe y el estilo de vida, criterios y opciones que realizan, esto revela la necesidad de realizar un camino discipular y misional. Esta realidad que se da en todos los niveles culturales y sociales, se hace más grave cuando se da en aquellos cristianos que tienen responsabilidades sociales por el ejercicio del poder que poseen, e ignoran el compromiso que la fe conlleva en todos los ámbitos de la vida social, política y educativa”. Aseveró Martínez, “la vida de fe para un cristiano debe impregnar todos sus actos, debe ser un estilo de vida, implicando también sus criterios y opciones personales.”
Instó a que cada uno en su labor, intervenga con el compromiso que implica ser cristiano, que recen para poder reflexionar sobre estos temas. Invitó a que acompañen a Jesús, en esta Pasión y Pascua y lo internalicen en su vida diaria.
Finalizó sosteniendo que cada uno de los que desempeñan el rol de conducir, desde su aporte cotidiano permiten “crear y recrear un sociedad más humanista, más cristiana y con mayores valores”.
Este retiro, tuvo por objetivos promover un encuentro entre los equipos de conducción de las instituciones educativas de la diócesis posadeña, a fin de facilitar la unidad y la comunión de la gran familia que conforma la educación católica. Asimismo, apuntó a reafirmar y profundizar el compromiso y la responsabilidad, de los miembros de la comunidad educativa, en la transmisión de los valores evangélicos expresados en el ideario educativo, con miras a vivir el año de la fe.
El encuentro concluyó con gozo por la celebración de la Santa Misa y los análisis alcanzados, acerca de la experiencia personal de, cómo cada uno vivencia a Dios en su comunidad educativa.
