La Justicia investiga el entorno laboral de la víctima. Alguna actividad del empresario puedo haber desencadenado su triste final. El caso está bajo secreto de sumario. Aparecen nuevas hipótesis en la causa que aún está sin detenidos y con celosas reservas, una de ellas, que fuera víctima de «Piratas del Paraná», una banda paraguaya que hace tiempo amedrentaba a embarcaciones argentinas para asaltarlas.
Luego de que se diera a conocer el resultado de la autopsia, el juez de Instrucción Fernando Verón caratuló la causa como homicidio simple y está abocado a analizar diversos elementos para establecer las circunstancias del episodio e identificar a los homicidas que, se cree, fueron al menos dos, ya que el empresario tenía una gran contextura física como para que uno sólo pudiera dominarlo.
Una de las hipótesis surgidas durante la investigación apunta a un crimen cometido por cuestiones vinculadas a actividades comerciales paralelas que Manfredi pudo tener, por lo cual se investiga a su entorno laboral y vínculos personales.En ese marco, el magistrado tomó declaración a allegados a la víctima, entre ellos a su madre y a la mujer con la que convivía, de apellido Azula, quienes le dijeron que no estaban al tanto de que Manfredi hubiera recibido amenazas o que tuviera enemigos.
Además, el juez Verón ordenó realizar un pormenorizado análisis de los llamados que realizó y recibió el empresario en las horas previas a su desaparición, con el fin de establecer si planeaba encontrarse con alguien o llevar adelante algún tipo de actividad comercial en los días siguientes.
Por el momento, el juez sabe que cuando se aprestaba a navegar, el empresario recibió dos llamados de una mujer que lo invitó a ir a un club náutico de Posadas, aunque él le dijo que no podía, ya que tenía un compromiso asumido con anterioridad, dijeron los voceros.Manfredi (51) desapareció la tarde del martes último cuando salió a navegar a bordo de su jet sky por el río Paraná, alrededor de las 16.
Una hora después, la víctima llamó desde su teléfono celular a un amigo, un empresario náutico que le había vendido el jet sky, para pedirle ayuda porque acababa de tener un inconveniente con el vehículo. Cuando el amigo fue al lugar y no lo encontró, realizó la denuncia de su desaparición y la policía comenzó a investigar el caso.
A las 20 de ese mismo día, en la costa paraguaya, la Prefectura de ese país halló el jet sky en el agua, sin rastros de su dueño. Al día siguiente, el pasado miércoles, a las 19.45, el cuerpo de Manfredi fue encontrado en el agua, a unos tres kilómetros del lugar donde navegaba, aunque la autopsia indicó que el cadáver estaba sumergido desde hacía 12 horas y no 27, tiempo que estaba desaparecido.
“Piratas de Paraná”, una posibilidad que se baraja en el crimen
Con el correr de los días, crece con fuerza la posibilidad de que el empresario Jorge Manfredi haya sido asesinado en Paraguay, o al menos por personas de esa nacionalidad. Los denominados “Piratas del Paraná”, habrían provocado inconvenientes en tripulaciones misioneras días antes de la desaparición y posterior muerte del comerciante avícola.
Una persona que prefirió preservar su identidad, confirmó a este medio que el sábado pasado, cuando navegaba en familia, fue abordada por una embarcación paraguaya que aseguraba ser de la Prefectura de ese país, cuando en realidad no lo era.Básicamente, lo que estos navegantes querían, era quedarse con dinero y propiedades de estas personas o cobrar algún tipo de peaje por circular por esa zona (lado paraguayo del Paraná).
Según se supo, la propia Prefectura argentina habría advertido a los tripulantes posadeños de la existencia de una banda dedicada a la delincuencia, en este caso en aguas del río Paraná.Si bien la versión no fue confirmada por la justicia que investiga el homicidio de Manfredi ni tampoco por la fuerza de seguridad nacional, hay testimonios que dan fe de estos atracos en el agua.
Solamente, no cuadra la hipótesis, porque la moto del empresario ultimado de tres golpes en la cabeza, apareció en perfecto estado y sus pertenencias estaban en el vehículo náutico.En este contexto, la policía nacional paraguaya había advertido a las autoridades argentinas que desde el año pasado se vienen registrando robos y asaltos a embarcaciones en aguas del Paraná, cometidos por una banda a la que denominan “Piratas del Paraná”, aunque en este caso al empresario no lo despojaron de nada y lo que hace dudar al juez de esa pista como móvil del homicidio.
