Su cuerpo fue entregado ayer a los familiares y con el correr de las horas crece la hipótesis que fue asesinado. La autopsia estableció que tenía tres golpes en la cabeza.
El empresario que se perdió en aguas del río Paraná y luego fue hallado muerto, tenía tres golpes en la cabeza con un elemento contundente en forma de romo. El juez Fernando Verón abrió una causa por homicidio y aseguran que no tenía agua en los pulmones, lo que indicaría que habría muerto antes de caer al agua. Ayer, cerca de las 20 entregaron el cuerpo a sus familiares.
El caso que involucró una misteriosa desaparición y una desesperada búsqueda, ayer tomó un rumbo diferente al de las primeras hipótesis que hacían pensar que había muerto ahogado. Durante el día de ayer se conocieron algunos resultados preliminares de la autopsia practicada sobre el cadáver del comerciante y en ellos se estableció que no tenía agua en los pulmones.
Como si fuera poco, también se confirmó que el empresario presentaba signos de haber recibido tres golpes en la cabeza. El juez que entiende en la causa, Fernando Verón, manifestó que las características de las vías respiratorias no mostraban los rasgos típicos de un ahogado, pero son notables las tres contusiones con objeto romo en la masa craneana.
El magistrado comenzó ahora el seguimiento telefónico de los últimos contactos con Manfredi, para así abrir una causa investigativa por un posible homicidio.
El cuerpo fue entregado cerca de las 20 a la familia luego de una serie de inconvenientes que hubo con la casa funeraria. Al parecer, el cuerpo se había hinchado demasiado o simplemente no calcularon bien el tamaño del fallecido y debieron buscar otro cajón al momento de la entrega programada.
Entre los familiares y amigos, existen algunas dudas sobre el caso, como ¿qué provocó la pérdida de las llaves, tema por el que Jorge Manfredi llamó a Náutica Leo?. Sobre el celular, dijo la esposa: “Me avisó que no andaba la llave, (pero) ahora se encontró la moto y su celular en perfectas condiciones, eso no nos podemos explicar”, dijo Susana.
Consultados sobre la posibilidad de que fuera asesinado, los familiares, en medio del lógico dolor, indicaron que no tenía problemas con nadie y en caso de ser cierto no tienen idea de quién pudo haberlo hecho.
En las últimas horas empezó a circular la versión que un día antes de la desaparición del empresario, una embarcación misionera habría sufrido un intento de atraco por “piratas del río” que no se descartan que sean de origen paraguayo.Las 12 horas o poco menos que estuvo el cuerpo en el agua, hacen prever que pudo ser asesinado en el vecino país, según alguna de las posibilidades que se maneja en el caso por estas horas.
