De enero a noviembre ingresaron más de 696 millones de kilos de hoja verde a secaderos, 30 millones más que en igual período del año pasado. Las ventas a salida de molino registran una baja de 4 millones de kilos en relación al año pasado y la cantidad de yerba en stock aumentó en diez millones de kilos. El Informe.
Los datos dados a conocer hoy por el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) contradicen los pronósticos realizados desde el sector yerbatero en la primera mitad del año, cuando se anticipaba una cosecha pobre por causa de la sequía del verano pasado y el ataque de la “plaga del rulo” e incluso se temía por el abastecimiento de hoja verde a las industrias. Nada de ello ocurrió, muy por el contrario el volumen cosechado en los primeros once meses de 2012 supera al obtenido en el mismo período en los últimos cinco años.
Tampoco se produjo una reducción en la cantidad de yerba almacenada, tal como se temía, lo que hubo en cambio fue un incremento: el stock de canchada en manos de secaderos, operadores y molinos se incrementó de 185 millones de kilos en noviembre de 2011 a 193 millones de kilos en igual mes de este año; mientras que el stock de yerba molida en manos de los molineros, aumentó de 12 a 14 millones en el mismo período.
Las ventas al mercado interno, en tanto, registraron una baja interanual de 4 millones de kilos, lo que representa poco menos del 2 por ciento del total. La caída de ventas se concentró exclusivamente en abril, cuando de los molinos salieron solo 13 millones de kilos de producto elaborado, mientras que el promedio para los otros meses fue de 21 millones de kilos.
El piso en las ventas coincidió con el momento en que los molineros trasladaron a sus precios el aumento establecido por Agricultura de Nación sobre el valor oficial de la hoja verde y consecuentemente los precios del paquete puesto en góndola se incrementaron hasta 100 por ciento. Pero la retracción del consumo duró menos de un mes, ya que luego de la notoria caída de los volúmenes demandados por el mercado interno en abril, en mayo se registró el récord de consumo con 23,7 millones de kilos.
