Acá no hay banderas ni modas, en los recitales de heavy metal hay aguante, pogo, puños levantados y remeras chorreando pasión expresada en sudor. El Tributo a V8 la más grande banda del heavy metal Argentino, llegó a Misiones y agito el caldero metalero de la tierra colorada. El Tributo a V8, sumado a Mastifal y las misioneras Desangre y Hanuman demostraron que el público metalero de la tierra roja tiene aguante, en un excelente recital en la noche del sábado posadeño.
“Hacemos canciones de V8 porque es la banda más grande de la historia del metal Argentino y esta es nuestra forma de presentar un respetuoso tributo” afirmó Walter Meza (vocalista de Horcas y del Tributo a V8) al comenzar su presentación en Misiones. Además indicó que “si bien V8 solo edito tres discos, cada canción marcó a fuego el sentir de los roqueros argentinos”. El recital comenzó pasadas las 21,30 horas con el calentamiento del público a cargo de Desangre y luego de Hanuman que viene de festejar su primer año como banda; luego llego Mastifal y el Tributo que inflamos los corazones hasta pasadas las 4,30 de la madrugada misionera.
Las bandas misioneras comenzaron a arrancar los primeros pogos con sus canciones y covers. Desangre presento su repertorio de Thrash Death por cerca de una hora expresando en cada canción suya toda su fuerza y expresividad, traída de Campo Viera. Luego le llego el turno a Hanuman, demostró una vez más la fuerza que tienen en el escenario, tocando canciones propias y covers, agitaron al público y elevaron la temperatura del salón del club Huracán. Ambas bandas agradecieron al público por hacer el aguante en cada recital que se realiza en la ciudad.
Pasadas las doce y media subió al escenario Mastifal, sin dudas una de las bandas más aceitadas del metal duro en el país. Mastifal o el “Príncipe de los demonios” según el libro mitológico Diccionario de los infiernos trajo todo su death metal/thrash metal desde Colón, Entre Ríos, para el deleite del público misionero que coreo cada canción suya. La banda recorrió toda su discografía y recibió la calidez de los misioneros que pogearon y agitaron en cada tema.
Miguel el vocalista de Mastifal – quien de ser fan pasó a cantante, desde el 2001 – sabe lo que es el aguante del público en los recitales, por lo que agradeció luego de cada canción el agite del público misionero. Remarcó que si bien es la primera vez que la banda llega a la tierra colorada, ahora quieren volver, agradecidos por el trato y el respeto del público.
Llegada la hora del Tributo a V8, el público enloqueció y canto hasta enronquecerse, al escuchar de entrada “Destrucción” el más clásico de los clásicos de la banda de los ochenta. Luego Walter Meza hablo de la importancia del Tributo, agradeció Gustavo Rowek, baterista que formó parte de la mítica banda y recordó, pidiendo un aplauso para cada integrante de la banda, incluso para los que solo estuvieron un tiempo en ella, el público exploto al recordar al fallecido Civile.
El homenaje a V8 se extendió por un repertorio inmenso de canciones, como Brigadas Metálicas, Muy cansado, Estoy, Voy a enloquecer, Tiempos Metálicos, entro otros clásicos coreados por todo el público. Meza cerró el recital de una forma clásica en el arrojándose al público, el cual los sostuvo en el aire, dándole afecto, y luego lo devolvieron al escenario para el saludo final.
