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La Jueza, Civil, Comercial y Laboral de Jardín América, Laura Marcela González, procesó ayer viernes a Francisco B. por homicidio calificado por alevosía. El hombre se encontraba detenido desde el pasado 3 de octubre por el asesinato de Angélica Ramírez (14 años) ocurrido el pasado 27 de septiembre.
La notificación de la jueza llegó este viernes a las 14 horas al abogado defensor de Francisco, el Dr. Miguel Bareiro, quien este mismo viernes ofreció una conferencia de prensa donde manifestó su sorpresa por la decisión. “Nos sorprendió la decisión ya que todavía no llegaron las pruebas que se pidieron la semana pasada relacionadas a la ampliación del informe de ADN”, dijo el letrado. Por otra parte aseguró que “no se hace cargo del levantamiento social que pueda surgir como consecuencia de esta irregularidad jurídica”.
En esa línea el abogado señaló que responsabiliza a la justicia local por lo que le pueda ocurrir físicamente a su defendido. Con respecto a la decisión de la Dra. González, el Dr. Bareiro recordó que todavía faltan los resultados de los estudios “hay otras personas que deben ser investigadas y se esperan los patrones genéticos de tres hombres”, dijo.
El próximo paso judicial, será el traslado de Francisco B. a la alcaidía de prevenidos dependiente de la unidad penal 3 de Eldorado, cuestión que deberá resolver en las próximas horas la unidad de traslados.
La defensa
El abogado del detenido, Miguel Bareiro, presentó un escrito ante el juzgado de instrucción local (donde se constituyó la magistrada), para manifestar su disconformidad ante las actuaciones de González. La magistrada sigue una única línea de investigación tal como lo hiciera el juez Acosta, es decir, la imputación del detenido. Pero la prueba material más fuerte contra el hombre, se produjo en circunstancias irregulares, no sólo porque el hijo del juez que instruyó el proceso está sospechado de participar en el crimen, sino porque no se cumplieron con los requisitos procesales (la presencia de dos testigos y del secretario del juzgado). Se trata de unas prendas que tenían manchas de sangre, algunas de las cuales pertenecían a la víctima.
Según Bareiro, la queja contra la jueza González, se sustenta en la “denegación y retardo de Justicia” y por “violación del precepto constitucional del debido proceso”. Semanas atrás, el Dr. Bareiro aseguró que existen varios sospechosos con pruebas más fuertes en su contra, que están en libertad, siendo su defendido, el único detenido. Además, Bareiro recusó a la magistrada por expresar públicamente que las investigaciones realizadas por la policía local y por el juez Acosta habían sido “impecables”. González aún no se expidió sobre la recusación en su contra. (Puertoricoahora).
