Proyecciones. Hassan asegura que el Presupuesto 2013 implicará crecimiento.
El secretario de Hacienda, Daniel Hassan, aseguró que Misiones mantiene un ritmo de crecimiento porque logró contar con recursos propios y achicó el endeudamiento. Anticipó que se sostiene la inversión pública como motor del desarrollo.
Daniel Hassan conoce desde hace más de una década los detalles de la economía de Misiones y desde 2003 es el secretario de Hacienda. Nadie ha durado tanto en el cargo como él. Cultor del bajo perfil, su mundo son los números y conocedor de crisis pasadas, asegura que la economía seguirá creciendo pese a algunos remezones de la turbulencia internacional.
“Calculamos un crecimiento económico para el 2013, de aproximadamente un 5 por ciento. Es lo que estimamos en el presupuesto 2013, de acuerdo a las proyecciones, el producto Bruto Geográfico rondaría los 100 mil millones de pesos, y nuestro presupuesto asciende a 12.500 millones de pesos con lo cual estamos hablando de una participación de un 12 ó 13 por ciento en el PBG, lo que implica que la participación del sector privado es muy significativa, de más del 80 por ciento.
En los últimos años cambió la matriz económica de Misiones. Se decía que era una provincia de servicios y no servía para otra y hoy eso se revirtió…
Cuando se hace la medición del Producto Bruto Geográfico, uno ve el cambio de tendencia de una provincia que en algún momento se decía de servicios, que pasó a ser una productiva en sectores terciarios, si bien hay un importante aporte del sector servicios, es más importante el productivo. El sector primario hace un aporte más que interesante. La construcción pública y privada también tienen un ribete muy importante, tanto pública provincial, como nacional.
¿Cómo se hace para administrar recursos, cuando Misiones hoy es casi la última en el ranking en reparto federal?
Es una situación muy difícil, políticamente la provincia fue perdiendo recursos desde 1983 con sucesivos desencuentros políticos. Eso generó el caldo de cultivo para el endeudamiento público. Esa combinación derivó en una situación explosiva y a partir de 1999 y 2000 produjo una caída del Gobierno nacional y en el Gobierno provincial se tuvieron que cambiar paradigmas. Ceñirnos a lo nuestro, no gastar más de lo que se tiene, primero se recauda y después de gasta, no nos endeudamos más y hoy vemos con satisfacción que la Dirección Provincial de Rentas hace un aporte significativo a los recursos que tenemos que distribuir desde Hacienda. Por el lado de gastos siempre intentamos hacer economía, ser eficiente y eficaz. En esa doble vía de mayor recaudación propia, equilibramos la situación. Trabajamos sobre el endeudamiento duramente estos años y hoy podemos decir con satisfacción que nuestro mayor acreedor es el Estado nacional, más del 80 por ciento de nuestra deuda es con el Estado, la deuda que antes teníamos en dólares más del 80 por ciento, hoy la tenemos en pesos. La deuda que tenía alguna actualización con Coeficiente de Estabilización de Referencia, más del 80 por ciento hoy está sin CER. Es manejable, pero no está todo resuelto, hay que seguir buscando recursos, hay que seguir trabajando con la deuda y apuntar a un esquema misionerista que es lo que venimos haciendo.
Hasta 2013 es manejable la deuda por los acuerdos con Nación, pero en 2014 hay vencimiento cerca de 400 millones de pesos, ¿Cómo se afrontará eso?
Producto del desendeudamiento de estos cuatro años, de 2010 hasta 2013, la provincia no tiene cancelaciones de servicios por estar en período de gracia. A partir de 2014 hay fuertes vencimientos de la deuda y va a ir bajando a partir del 2015 o 2016. La cancelación total llegará en 2030. Ahora para 2014 y 2015 hay que prever los recursos suficientes para atender la cancelación de esos vencimientos. De no ser así hay que ponerse a trabajar con nuestro principal acreedor para refinanciarlos y hacerlo en más tiempo.
Lo destacable es que la deuda ocupa hoy la tercera parte del presupuesto, cuando llegaba a ser superior…
En 2003 nuestro presupuesto rondaba los 800 millones de pesos y la deuda era de 1.200 millones, era más deuda que presupuesto, hoy no es así, y la curva de presupuesto es ascendente, mientras que la deuda es descendente y con el tiempo va a ir desapareciendo.
Usted hablaba de un presupuesto generoso para las áreas sociales ¿Cómo sería el reparto?
El 54 por ciento del presupuesto es para áreas sociales, la mayor participación es de Educación con 27 por ciento y 13 o 14 por ciento aproximadamente van a Desarrollo Social y Salud Pública. Desarrollo social implica obras, no es solo el ministerio, y en Salud Pública hay que destacar la funcionalidad del parque de la salud a partir de la ley que se sancionó que logró una autonomía en el manejo de los recursos y de la fundación de un parque de la salud. Hoy tenemos un hospital que es modelo nacional.
Misiones aplicó una política pionera, en incentivar mucho la obra pública, el Estado como rector de la economía ¿Esto se va a mantener, se va a profundizar…?
Hay para 2013 una inversión pública de 3.800 millones de pesos, es un presupuesto alentador, vamos a seguir trabajando en eso. Si ven en el presupuesto el plan de obras públicas de todos los organismos ejecutores es alentador, se busca la obra pública con agregado social, obras que la comunidad vaya integrando a sus espacios, a sus relaciones sociales. Generando empleo, la obra pública tiene el principal componente del índice de costos al recurso humano, y gran parte de la obra pública, cuando pagamos, lo hacemos con nómina salarial. En esa matriz, los recursos humanos son más que importantes, siempre buscamos la generación de empleo para todos los misioneros.
¿Por qué Misiones no sale de la emergencia económica y previsional?
De la emergencia económica, sin ser peyorativo ni querer compararnos con otras provincias, algunas han salido de la emergencia económica y previsional legal, pero tienen una emergencia real. Tienen la imposibilidad de pagar aguinaldos, pagan sueldos escalonados, con proveedores muy retrasados, con la obra pública prácticamente sostenida solo por el Gobierno nacional. Esa no es la situación de Misiones. Hoy la emergencia económica está más que nada para sostener un andamiaje legal de defensa de los recursos de la provincia, y en ese sentido vamos a continuar. No tiene una incidencia en el común de la gente, en el empleado público, en los programas de Gobierno. Solamente está sosteniendo el anclaje legal que se diseñó contra los embates sobre la caja de la provincia, por la privatización de banco Provincia y del Instituto del Seguro, por la emisión de los bonos Senior y Juniors o los Cemis. Siempre estamos atentos a los reclamos de los jubilados, los entendemos, están en todo su derecho de reclamar. Ahora, la Emergencia Previsional ya fue derogada y asignamos 1.300.000 pesos por mes en recursos para que el Instituto de Previsión Social vaya cancelando o moviendo los topes que están ceñidos a esa ex emergencia previsional. Son jubilados que cobran montos superiores a los 10 mil pesos, el resto no tiene ningún tipo de implicancia.
La gran pelea que no termina de ser resuelta nunca es la coparticipación. Misiones es la que menos recibe, pero tampoco se avizora la posibilidad de discutir la nueva ley en el corto plazo, ¿es así?
Sí, es así. La ley de coparticipación federal debía de haberse sancionado en 1996, si nos ajustamos a la Constitución modificada en el ’94. Eso no ocurrió. En el gobierno de Néstor Kirchner, los gobiernos provinciales estuvimos trabajando en un proyecto de coparticipación que establecía que ninguna provincia iba a recibir menos que el año anterior y los excedentes que se iban a ir dando, se iban a distribuir con indicadores objetivos, más equitativamente, con premios y castigos en función a la eficiencia, la recaudación, el gasto. Estaba bien elaborado pero lamentablemente algunos representantes de provincias, algunos gobernadores, no tuvieron la mejor situación política y no prosperó.
La verdad que si uno mira la historia, termina siendo pesimista en ese sentido. Misiones es la provincia más castigada por la coparticipación federal. Somos últimos en distribución en el Nordeste y estamos 19 en el ámbito nacional.
Hoy vemos que esa matriz de distribución se replica en otros recursos, por ejemplo los de la soja, con lo cual la injusticia permanece y se mantiene. Y a eso hay que agregarle que la población de Misiones creció más que la media nacional y hoy tenemos más población que Chaco, entonces la injusticia va por doble vía, ahora tenemos menos recursos para repartir entre más personas.
Y aún así Misiones es una de las provincias que están consideradas a nivel país como mejor administradas. ¿Cómo se hace eso?
Tiene que ver con una fuerte decisión política, sin decisión política no se hace nada. Entonces la decisión política de no endeudarte, de conseguir los recursos, de ajustarte a lo que tenés, parece una regla muy elemental pero son reglas de oro. Y a partir de eso, todo. Entonces la sana administración viene porque uno tiene los recursos, y si tiene los recursos es porque recauda, y si recauda es porque tiene la norma y el apoyo de todos los cuadros técnicos, y el apoyo político. Lo mismo pasa con el gasto, porque las necesidades de la sociedad son permanentes e infinitas, todo el mundo quiere un poco más, vivir mejor, y eso está bien. Ahora, los recursos son escasos y en el arte de la distribución está la política: la política dicta estas reglas de oro.
Debe sentirse satisfecho porque es uno de los ministros de Hacienda o de Economía que más ha durado en el cargo en la Provincia
En realidad me siento apoyado, siempre veo que políticamente hay un respaldo a la gestión y eso es importantísimo, porque sin decisión política no se puede hacer nada.
