Un testigo confirmó que en el allanamiento del local las documentaciones estaban a nombre del imputado.
Un gendarme afirmó ante el Tribunal Oral Federal de Posadas, en la continuidad del debate por la causa del burdel en el que prostituían a menores en Bernardo de Irigoyen, que el local nocturno denominado “El Bar” estaba a nombre de Ramón De Lara, uno de los imputados por captación y explotación de chicas de no más de 17 años. También está en el banquillo Arminda De Mora (62), presunta encargada de otro prostíbulo situado en el mismo municipio.Un comandante de Gendarmería, como testigo, sumó detalles del procedimiento efectuado por la Unidad de Investigación de la fuerza, en la noche del 26 de marzo de 2010, en tres prostíbulos de Bernardo de Irigoyen.Según el efectivo, en uno de los locales llamados “El Bar”, cuando ingresaron, encontraron a dos hombres, entre ellos el imputado Gustavo Alvez (llega en libertad al juicio como partícipe secundario), quien dijo que “cuidaba el negocio” y que trabajaba para De Lara. Además fueron rescatadas cinco prostitutas, tres de ellas menores de edad que se presentaron con sus respectivas documentaciones.El testigo a su vez reveló que detrás de la barra, halló cuadernos con listado de “precios, consumiciones y pases” y documentación del local a nombre de Ramón de Lara.
Notificación a Zapana
Por su parte, el Tribunal notificó al defensor de Da Mora, Hugo Zapana, que el Juzgado Federal de Eldorado archivó una denuncia contra la psicóloga del Ministerio de Derechos Humanos, Victoria Pizarro. La especialista había sido acusada de presionar y amenazar a una de las víctimas para que se declare explotada sexualmente.
