A escala nacional, la caída en la actividad de la construcción se tradujo en la pérdida de 26.000 puestos de trabajo. En Misiones se mantiene el ritmo de la obra privada y no se redujo el dinero volcado por el estado a la obra pública. Advierten sin embargo que el panorama de incertidumbre frena nuevos proyectos de inversión también en la provincia.
Mientras que a escala nacional la construcción registra una fuerte retracción, en Misiones el sector trabaja con normalidad y con un nivel de concreción de obras similar al del año pasado.
La integrante de la Cámara Misionera de Empresas Constructoras, Silvina Lazarte, consideró que la actualidad de la construcción en la provincia es similar a la de años anteriores. Indicó que en la obra pública “hay un poco de atraso en los pagos, pero no obstante no se nota que haya una retracción”, mientras que en lo referente a la demanda del sector privado “todas las obras que se han iniciado continúan su ritmo normal”.
El panorama delineado por la empresaria contrasta con la realidad que vive el sector a escala nacional, signada por una fuerte retracción. Según datos del Instituto de Estadísticas y Registro de la Industria de la Construcción (Ieric), en el último semestre, el sector cayó abruptamente por la falta de obra pública y las trabas al dólar y desde noviembre de 2011 hasta abril pasado se perdieron más de 26.000 puestos de trabajo.
La también presidenta de la Cámara de Mujeres Empresarias reiteró en radio Libertad que todo lo que está iniciado continúa su ritmo, «pero en los nuevos proyectos se ven dilaciones en el cierre de las ejecuciones».
Respecto al sector público indicó que los atrasos en los certificados «son mínimos, no son alarmantes», y supuso que probablemente por atrasos de los envíos de los fondos de la Nación, en muchos de los proyectos de la obra pública que se desarrollan en las provincias hace que se genere el inconveniente, dijo.
En cuanto a la incertidumbre de iniciar nuevas obras en el sector privado, Lazarte expuso que se debe a “todas las medidas que se han tomado últimamente, por lo que se hace más difícil desarrollar transacciones inmobiliarias, los inversores son los que manejan el tema de la construcción de edificios, si no está claro en el día de mañana poder vender lo que estoy construyendo, no tengo certeza de invertir ahí”
Recordó que en los últimos tiempos “la mejor inversión era en el ladrillo, era más rentable construir que guardar el dinero”.
La constructora consideró que el empresariado se plantea que “no será tan simple el tema de vender la inversión y voy a pensarlo más”, porque afectaron las políticas del mercado cambiario.
Desplome nacional
En el lapso de fines del año pasado hasta abril del 2012, se destruyeron 26.280 puestos de trabajo en el rubro de la construcción. La merma significa una retracción abrupta en la cantidad de empleos en blanco. Según los datos del Instituto de Estadísticas y Registro de la Industria de la Construcción (Ieric), en noviembre pasado se alcanzó un pico de 438.360 de posiciones laborales, reduciéndose en la actualidad a 412.080.
Los datos más recientes del Indec informan que en mayo la caída fue más significativa, retrayéndose un 8,8 por ciento respecto del mismo mes del año pasado, mientras que un 1,9 pr ciento ponderado con abril.
Para Carlos Wagner, presidente de la Cámara Argentina de la Construcción, la destrucción del empleo registrado responde a las restricciones cambiarias, como a la desactivación de la obra pública.
