El Cedit replicó un nanotubo gigante más resistente que el acero

Exposición del nanotubo gigante en la plaza 9 de Julio.

Exposición del nanotubo gigante en la plaza 9 de Julio.

Investigadores del Cedit construyeron una réplica del nanotubo de carbono (nano: mil millonésima parte), descubierto casi accidentalmente en los laboratorios, y que tiene interés fundamental para la química y por sus aplicaciones tecnológicas, por ejemplo los nanotubos de carbono más resistentes que el acero se utilizan hoy día para reforzar materiales. La estructura construida de acero y telgopor, de una escala mil millones de veces ampliada de su tamaño natural formará parte de una muestra itinerante en exposiciones y escuelas. También podrá verse en el Ceditec (ubicado detrás del Centro de Convenciones), donde en agosto recibirán la visita de 24 escuelas.

 

Según explicó el titular del Comité Ejecutivo de Desarrollo e Innovación Tecnológica, Carlos Schvezov, “todo lo que sea nano, por ejemplo el millonésimo espesor de un cabello tiene propiedades desconocidas de todos los otros materiales por el tamaño, es decir se dan interacciones no sólo con lo que rodea sino por sus propias propiedades”.

 

Precisó en el caso del nanotubo de carbono, “es una estructura estudiada y tiene propiedades mecánicas sorprendentes muy fuertes, más resistentes que el acero y que hoy día se utiliza para reforzar materiales, por sus propiedades eléctricas, ya que es muy conductor”.

 

El nanotubo fue la primera nanoestructura descubierta y “ha generado el interés por la posibilidad de producir y estudiar otras nanopartículas”, dijo el físico misionero.

 

Las nanopartículas están hace tiempo y hoy día hay una explosión de investigación en todo lo que es nanopartícula, fundamentalmente por todo lo que es desconocido y sus propiedades particulares, agregó.

 

Cada nanopartícula se utiliza en función de lo que puede dar, en el caso particular de Misiones, el Cedit y en conjunto con la Comisión Nacional de Energía Atómica “estamos trabajando en el tema de la nanopartícula pero en la producción de catalizadores para producir hidrógeno y oxígeno a partir del agua, y también para las celdas combustibles».

En otro caso, «casi por accidente y necesidad», según dijo Schvezov, en la facultad de Ciencias Exactas producen las películas de recubrimiento de dióxido de titanio para la válvula cardíaca. «También son nanoestructuras y «estamos en los tamaños de cristales y cristalitos en la composición adecuada para tener las mejores propiedades hemocompatibles con la sangre y también con las propiedades mecánicas de este material”, indicó.

 

Contra el cáncer

El titular del Cedit resaltó la aplicación de la nanotecnología para el tratamiento de enfermedades como el cáncer, «donde pequeños compuestos químicos se recubren con materiales especiales que hacen que estas partículas se adhieran a las células cancerígenas y ahí se produzca el envío del químico a las células y a los tumores específicos, controlándolos, destruyéndolos, combatiéndolos sin dañar el resto del cuerpo humano que es lo que ocurre cuando se inyectan químicos para combatir el cáncer, envenenando todo el cuerpo, en este caso va directamente al objetivo, al blanco, esas son las aplicaciones».

 

Otras nanopartículas como las de plata y dióxido de titanio ya están utilizados en mil productos por lo menos, «no nos damos cuentan que están desde productos que son físicamente estables como una media, un recipiente para cocina, para guardar alimentos y que con la acción de nanopartículas de plata que tiene efectos bactericidas se prolonga y se preserva el alimento en mejor forma, por más tiempo», precisó el docente investigador de la UNaM.

Otros como pasta dentífricas, shampúes y otros productos de higiene tienen nanopartículas que también ayudan a limpiar bacterias y microorganismos en el cuerpo humano y que van a parar a los efluentes urbanos, y eso puede ser perjudicial, dijo.

En la naturaleza, si se inocula un árbol con nanopartículas de oro y otro segmento interfiere con el proceso de fotosíntesis hace el árbol luminoso, uno puede iluminar árboles durante la noche con partículas de oro, hay trabajos hecho al respecto, añadió el titular del Cedit.

 

Las nanopartículas más usadas

En la actualidad existen alrededor de mil productos de uso cotidiano que contienen nanopartículas. Las tres más importantes son: la nanoplata, el dióxido de titanio y los nanotubos de carbono.

Las más usadas son las nanopartículas de plata, que se agregan a diversos productos que van desde pesticidas, pasta dentífrica, y utensilios de cocina, pasando por contenedores domiciliarios de alimentos, afeitadoras, calzoncillos, medias, jabones y shampoo.

Algunos fabricantes de pasta dentífrica como Colgate han dejado de usarlas en sus productos, por los riesgos aún desconocidos, en particular en los daños que puedan producir en la vida acuática.

 

Otras exposiciones

En la jornada de ciencias también se expusieron los pasos de la pasteurización de lácteos y jugos, cómo hacerlo, con los elementos correspondientes, tarea que estuvo a cargo de dos investigadoras.

También se explicó los pasos del proceso de elaboración de jabones caseros, mostrando elaboradores de diferentes formas y tamaños.

 

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