El Ministerio de Salud invertirá 67 millones de pesos adicionales en el Plan Nacer, para ampliar las prestaciones del programa para la atención de embarazos de alto riesgo y prematuros. El objetivo es continuar disminuyendo la mortalidad materna e infantil neonatal.
“El descenso de la mortalidad infantil alcanzado en nuestro país se encuentra en valores que requieren de mayores inversiones e intervenciones en la alta complejidad neonatal”, afirmó el viceministro de Salud, Máximo Diosque, y anunció que el Ministerio de Salud, junto con los gobiernos provinciales, realizará a través del Plan Nacer una inversión adicional que alcanzará los 67 millones de pesos.
Diosque señaló que “de esta manera, el Plan Nacer se ajusta a las necesidades de las provincias para continuar con ese descenso” de la mortalidad infantil.
Además, la cartera sanitaria informó que desde mayo pasado comenzó a brindar cobertura al embarazo de alto riesgo, y atención y seguimiento del recién nacido prematuro para todos sus beneficiarios.
«La inclusión de estas prestaciones que se suman viene de la mano de una ampliación progresiva de la cobertura de salud del programa, que desde 2005 benefició a más de 4 millones de embarazadas y niños menores de 6 años sin obra social en todo el país» detalló el ministerio de Salud en un comunicado.
La responsable nacional del Área Médica del Plan Nacer, Ana Sala, afirmó que “poder derivar a una embarazada de alto riesgo significa identificar una red y conocer el grado de complejidad que manejan las diferentes instituciones. Esto beneficia a la embarazada, por ser atendida en centros de complejidad acordes al valor de su patología”, y aclaró que, además, “el establecimiento de salud que deriva podrá facturar esa consulta a valores diferentes de una consulta habitual”.
El Plan Nacer
El Plan Nacer es un programa del Ministerio de Salud que invierte recursos para mejorar la cobertura de salud y la calidad de atención de las mujeres embarazadas, puérperas y de los chicos menores de 6 años que no tienen obra social. Se inició en el año 2005 en las provincias del noreste y noroeste argentino, y en 2007 se extendió a todo el país.
Según indicó la caretra «el programa se distingue por desarrollar Seguros Públicos de Salud para la población materno-infantil sin obra social y ser un modelo de financiamiento basado en resultados alcanzados; por generar un cambio cultural en la visión y gestión de la salud, que priorice la estrategia de la atención primaria de la salud (APS), la producción del sistema y la utilización efectiva de los servicios de salud; y por contribuir al descenso de la morbi-mortalidad de la población materno-infantil, y a la reducción de brechas entre jurisdicciones».
