“El Estado debe crear espacios de expresión para los jóvenes”

El frontman de Las Manos de Filippi, la banda más combativa de nuestro país, nos regala una jugosa entrevista como antesala del explosivo show que presenciaremos el próximo viernes en el Club Huracán. Las Manos se presentan junto a Neto y Nectar, dos exponentes del mejor rock local.

20 años no son nada, dice el tango, pero en dos décadas pueden suceder muchas cosas, tanto en la política como en el rock. Hernán “Cabra”de Vega, vocalista, frontman y compositor principal de Las Manos de Filippi es el personaje ideal para demostrar que el rock combativo (el de verdad, ése que nunca se casa con el establishment) y la política nunca podrán separarse.

 

El 2012, para pesar de muchos, no será testigo del fin del mundo, pero sí habrá eventos para recordar. Las Manos de Filippi cumplen veinte años de historia, dos décadas que estuvieron marcadas por la música, el activismo, el compromiso político y social, el humor, la ironía y la fusión de ritmos. Uniendo aguas de diferente profundidad, cruzaron al antes  intocable rock argento con la cumbia, le metieron punk al ska y se convirtieron en una banda única en el espectro del rock latino y seguramente en el podio  de las más combativas del continente. Preguntas se nos ocurren muchas, pero la inevitable es ¿cómo se hace para ser independiente durante dos décadas y no morir en el intento?

La independencia nuestra no pasa por auto-marginarnos, ni el no usar a las compañías o distribuidoras, nuestra independencia apunta a hacer la música que queremos hacer. Nosotros hacemos los discos, y cuando usamos un productor artístico lo elegimos nosotros. Nunca una compañía se metió en la parte artística. En realidad, la independencia  es la única forma en que vemos el hacer música.

 

Hoy se habla mucho de ser independientes desde el punto de no meterse con las compañías multinacionales, pero también se debate el  tocar o no en shows organizados por el gobierno.

Antes el rol de la compañía se limitaba a difundir la música que las bandas les daban, después  llego la idea de que se vendía más metiendo un productor artístico como figura, a veces más importante que las mismas bandas, como Santaolalla y todo esos. Allí la compañía, por medio del productor, se mete en la parte creativa, en ese momento  es cuando se pierde la independencia. En ese punto fue en el que nosotros no entramos.

 

De todos modos, uno no se imagina a una banda como Las Manos tocando para un gobierno sin bajar línea, ni a una entidad oficial contratando a una banda que sabe que le tirará palos.

El Estado tiene la responsabilidad de crear espacios para la expresión de los jóvenes. No te digo para una banda como Las Manos, porque ya somos todos viejos, pero el Estado no debería mirar a quién apoya ni se debe permitir una censura para una banda que no lo apoya. Lo que pasa es que no existe que el gobierno apoye a una banda sin comprarlos políticamente. Nosotros somos parte del M.U.R. (Músicos Unidos por el Rock) e intentamos exigirle al Estado que apoye a las bandas, que les de facilidades para tocar y para la difusión, o sea, todo lo que no hay, y que a partir de la masacre de Cromagnon, dejó a la vista la clase de lugares que le quedan a los pibes para tocar. No hay que tenerle miedo a pedirle al Estado, es la lucha. Lo otro que te queda es pedirle al espacio privado, y a un privado no podes exigirle nada, porque se entra en un juego comercial. El Estado tiene la responsabilidad de generar cultura, escuelas de arte, espacios donde los pibes puedan crear.

 

Hay dos corrientes, la que dice que un verdadero under o independiente no debe pedirle ayuda a nadie, pero la otra postura indica que hay que utilizar las herramientas que hayan a mano para difundir el arte.

Es que hablamos de pedirle al Estado, el Estado no es una empresa, aunque a veces parece que sí, pero sacarle algo al Estado debería ser un orgullo, porque se lo saca con la lucha. Como un movimiento de desocupados que le exige soluciones al Estado. Ese dinero que no se invierte en arte va a parar a pagar la deuda externa o negocios raros.

 

Argentina siempre fue vanguardia del rock en español, y eso en gran parte se lo debe a esa gran tragedia que significó la Dictadura, seguramente por el principio de acción y reacción. La Dictadura, la crisis del 2001, Cromagnon, sentís que el rock se hace fuerte ante esas cachetadas tan fuertes?

Cuando el rock arrancó en la Argentina no era una actividad de las masas. Moris, Claudio Gabis, Spinetta, Javier Martínez, eran eruditos, músicos grosos. Hoy cualquier pibe de 14 anios se junta con otros y arman una banda. Es algo ya incorporado por la juventud como una actividad que se la  han ganado, y eso lo convierte en un negocio. Así el Estado lo ve con buena cara para privatizar el circuito de bandas y aprovechar que hay tantos jóvenes haciendo rock y generando una actividad económica para crear una sensación de que hay libertad. Creo que el paso que hemos dado, después de Cromagnon y junto a otros músicos ya grandes, fue tratar de ponernos a la altura de los trabajadores de cualquier gremio que trata de organizarse. Porque eso del músico en el pedestal, la estrella que lo único que les importa es tocar la guitarra y estar más allá de las clases sociales es lo que nos ha hecho tanto mal. Eso creó una cantidad de Pomelos (por el personaje de Peter Capusotto) que no sirven para nada. Nosotros nos ponemos a la altura de la clase trabajadora cuando salimos a luchar por nuestros derechos. Al hacer música nos sentimos apoyados por todos los gremios que luchan y a la vez nos da la posibilidad de solidarizarnos con los trabajadores a un nivel más coherente.

 

Qué cambió en el rock en este tiempo?  En los 90´s las multinacionales dominaban el mercado, estaba el reinado de MTV. El nuevo milenio quedará marcado para siempre por la sombra de la caída de De La Rua y Cromagnon. Que nos espera para esta década?

El haber corrido a un presidente mediante protestas callejeras marcó a la juventud, de la misma manera que lo de Cromagnon. Eso le creó una nueva conciencia al rock. Los pibes cambiaron la cabeza y ese personaje Pomelo ya no va más. Hay una conciencia más clara. Fueron golpes duros, pero crearon una nueva conciencia. Hoy los que salen a la calle son los jóvenes, los grandes son Kirchneristas o anti K, pero no ven la tercera opción, que es la de organizarse contra un sistema en crisis, una lucha más global.

 

Hablábamos de los cambios en el rock en las décadas, pero también ha cambiado la política. Cambiaron los gobiernos, los partidos, incluso la filosofía del poder ha cambiado, pero los laburantes siguen laburando por muy poco y los ricos son cada vez más ricos.

El hecho de que los gobiernos se deban ir tirando a la izquierda demuestra que son los laburantes los que están en la izquierda. Hoy podemos decir que este país esta corrido a la izquierda, y por eso el gobierno tiene un chamuyo de progre y de izquierda. Los gobiernos van detrás de la sensación de cómo está la gente.

 

 Hablemos de los piqueteros. Sus métodos siguen siendo “los mejores y los únicos”?

Lamentablemente el piquete sigue siendo el único método que le soluciona los problemas a la gente, la manera más efectiva  de sacar a un conflicto de la ignorancia del gobierno y del resto de la sociedad.

 

Y qué onda con el que está del otro lado del piquete?

En el momento de saltar por un lado u otro del piquete, pienso que entre el problema de un tipo que va a llegar tarde al trabajo  y otro que lucha porque no lo tiene, que no tiene para darle de comer a sus hijos, creo que no queda duda. Lo que ocurre muchas veces es que el que no puede pasar termina solidarizándose con los del piquete. En general no existe tal guerra entre un lado y otro, lo que sucede es que los medios lo magnifican y corren la discusión hacia el lado del que se siente molesto por los piquetes en lugar de discutir la problemática de los que no tienen laburo.

 

En Posadas se acaba de presentar un proyecto para disminuir el canon a los dueños de locales que contraten músicos del medio para tocar, viéndolo como una manera de incentivar la actividad artística local. Pero el tema es más profundo, nos encontramos ante un Estado con  leyes que impiden el desarrollo de una actividad artística.

Todo ese tipo de apoyo a los bolicheros es parte del debate que surgió de las charlas con los muchachos del M.U.R. Nosotros planteamos que son leyes hechas para los bolicheros y no para los músicos. Es un poco lo mismo que el chamuyo que hacen los burócratas sindicales que lo único que hacen es sacar dinero para los empresarios y no para los trabajadores. Todo desde una hipótesis de que si los empresarios están bien ellos van a contratar a los músicos y así  los artistas van a estar mejor. Yo creo que los músicos nos tenemos que organizar con los músicos y trabajadores que quieran trabajar y no hacer frente con los bolicheros. Hay que exigir centros culturales y apoyo a los músicos. Esta bueno que los empresarios te contraten, pero el estado tiene que apoyar a los artistas, no a los bolicheros.

 

Y LA MÚSICA?

Hablar con el Cabra, un activista 25 horas al día obliga a deja la música en un segundo plano, y él lo tiene perfectamente asumido. Al preguntarle si le molesta que cuando se habla con él siempre la música queda en segundo plano, él responde con sinceridad: “Los muchachos de Las Manos siempre me piden que hable menos de política y más de nuestra música, pero para mí es inevitable. El rock tiene un factor político y social muy grande, y a mí me encanta hablar de eso”.

 

No obstante hay que hablar del show que presenciaremos este viernes en el Club Huracán. “los muchachos están afiladísimos, venimos preparando todo para el show que daremos para festejar los 20 anios de Las Manos, y el show de Posadas será uno de los últimos de la presentación del disco La Calesita de Mamanis (lanzado el anio pasado), y eso está bueno, porque los pibes ya conocen más el disco y se conocen las letras.

 

Las Manos es una de esas bandas, como Massacre y muy pocas más, que tienen un rollo particular con la Tierra Colorada, tal vez a partir del himno psilocibínico popularizado por Rodrigo, sobre su relación con nuestra provincia, el Cabra responde…

 Nos encanta Misiones, tocar con Neto siempre es un placer. Siento que la Tierra Colorada es La Tierra, me encantaría algún día vivir allí.

 

Ya casi al finalizar, le advertimos que ante el avance de la civilización, el Cebú es casi una especie en extinción por estos lados, y que para encontrar esos viejos campos floridos hay que alejarse mucho de la ciudad, el Cabra no se inmuta: “tal vez deba bajarme antes del colectivo”, expresó. Salú

 

LA CLAVE ESTÁ EN LA ORGANIZACIÓN

LaS Manos de Filippi, junto a otras bandas grandes como EL Otro Yo, LA Renga, Kapanga y A77AQUE y muchas más, al margen de los géneros musicales,  coinciden en que la clave de un  rock fuerte, sano y combativo, está en la organización. En el país hay multitud de espacios de acción en conjunto, pero los más activos son el M.U.R. (Músicos Unidos pro el Rock) que pelea por mayor apoyo del Estado y que se considere al músico como un artista más, y la U.M.I. (Unión de Músicos Independientes), cuya mayor ambición es generar una cultura de autogestión. Se recomienda a los músicos y artistas locales pegarse una vuelta por sus respectivos sitios web para enterarse mejor de qué se trata.

 

 

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