También podrán mejorar cicatrices de cesárea y estrías del embarazo.
Hacer lo más invisible posible la fea cicatriz de una cesárea, mejorar las estrías de la panza causadas por el embarazo, que la vagina pueda «rejuvenecerse» y no tener más «orejitas de Dumbo», al decir de un especialista, corregir un prolapso y lograr blanqueamientos genitales. Todo eso en un futuro y con cirugías mínimamente invasivas podrán hacerlo los ginecólogos misioneros y para eso se están capacitando en cursos que se dictan en el sanatorio Boratti, en Posadas.
El ginecólogo Roberto Solís Pérez, quien vino de Veracruz, México, al curso de Cirugía vaginal y cosmetoginecología que se realizó durante tres días en el sanatorio de calle San Luis casi avenida Mitre explicó que tradicionalmente el ginecólogo se ha centrado en operar «como Dios le da a entender y la mujer no le toma en cuenta muchos aspectos de su figura, forma y que en la ginecología al mismo tiempo de hacer procedimientos curativos se puede hacer procedimientos correctivos o de mejoría».
Ejemplificó casos de cesáreas que dejan cicatrices feas, gruesas, paradas, irregulares, y «lo que hace la ginecosmética es tratar que la herida quede bonita, subdérmica, simétrica, plana, si hay exceso en el segmento inferior, lo que en México le dicen vulgarmente el Mandil, hay que corregirla en el momento mismo de la cesárea».
«El ginecólogo tiene que evolucionar, no ser más operadores y operadores»
El especialista mexicano aclaró que no han surgido nuevas tecnologías médicas para la cosmetología ginecológica, sino «lo único que se hace es aplicar técnicas cosméticas a las técnicas quirúrgicas tradicionales, la cirugía cosmética no es nueva, sino ahora le damos más importancia al aspecto de la figura de la mujer y de la autoestima, el ginecólogo tiene que evolucionar, no podemos ser más operadores y operadores, y no darnos cuenta que la mujer tiene cosas exquisitas que tenemos que cuidar».
Mejorar la cicatriz de la cesára con sangre del cordón umbilical
Solís Pérez dijo que es posible que los cirujanos puedan ofertar lo que cada paciente requiera para el embellecimiento genital, porque «,hay quienes tienen tendencia a cicatrices hipertróficas, quebroides, tenemos técnicas, en el momento de la cesárea le podemos sacar sangre del cordón, se la aplicamos directamente en la herida y con eso le mejoramos considerablemente esa cicatriz muy fea».
Mejorar las estrías
El disertante extranjero dijo que también pueden mejorarse las estrías en el momento del parto, y explicó que «simplemente se aplican el plasma y las plaquetas, y ver las formas de operar, hacer suturas subdérmicas para que sea lo menos visible posible, y eso es la ginecosmética, nada del otro mundo».
Respecto a la respuesta de sus pares acerca de estas nuevas propuesta para pacientes misioneras, Solís Pérez es optimista y dijo «hay gente que le gusta estar en estos aspectos, hemos visto muchos entusiasmo de los ginecólogos acá y todos están contentos tratando de aplicar lo que estamos comentando en sus pacientes diarios».
Y reiteró en cuanto a los asistentes al curso que «la ventaja de todos estos grupos de médicos es que cuando vuelvan a su lugar de trabajo lo van a aplicar».
Aclaró que «no es necesario usar algún instrumento quirúrgico sofisticado, con lo que se tiene en la sala de cirugía cotidiana podemos hacer cosas muy bonitas, lo único que estamos haciendo es aumentar las propuestas».
El por qué del rejuvenecimiento genital
En el área genital se hace rejuvenecimiento vaginal y significa «hacer procedimientos para que a la mujer se le dé un aspecto juvenil, sucede, según explicó el ginecólogo mexicano, «por efectos de la edad los labios se van poniendo flojos, caídos arrugados y así como se hace en la cara también en el área genital se le da el estiramiento y se le da un aspecto más bonito, agradable, la mujer se siente muy bien y si tiene unos crecimientos exagerados de sus labios menores que parecen orejitas de Dumbo, la podemos recortar; si tienen pigmentaciones genitales o que estén muy oscuros se puede hacer un blanqueamiento genital que a la mujer le mejora su autoestima y funciona».
Estimó que en el futuro todos los ginecólogos lo van a hacer., habrá más cursos de capacitación y conforme vayan haciendo más procedimientos el ginecólogo se irá capacitando.
El prolapso, sostener con malla sintética
Otro médico especialista que disertó en el curso internacional de cirugía vaginal y cosmetoginecología fue el misionero Javier Del Longo, acerca del tema histerectomía vaginal y prolapso
Al hacer una evaluación de estas tres jornadas de capacitación, «lo que más se puede observar, no tanto el rejuvenecimiento, es en aquellas mujeres que tengan hipertrofia o agrandamiento de los labios menores de la vagina y le provoca alguna molestia o dificultad en sus relaciones sexuales, y piden a sus ginecólogos alguna solución quirúrgica y los ginecólogos misioneros podrán hacerlo».
El cirujano ginecológico expuso sobre histerectomía vaginal y el prolapso. Esto último se produce por déficit de mecanimos de soporte y de sostén de los órganos pélvicos y tiende a descender la vejiga, el útero completo y puede descender el recto, y «si esto le produce una alteración en la calidad de vida de la mujer, le molesta uno puede solucionarlo con diferentes técnicas actuales, una de ellas es recurrir a ciertas mallas de sustancia sintética para reforzar la base y esto no vuelva a producirse, si bien las técnicas son buenas existe una alta tasa de recidiva pero tiene que ver con la situación de uno, por ejemplo el prolapso en los animales no existe porque tienen cuatro patas, en cambio el humano bípedo todo el peso recae en el mismo lugar», explicó Del Longo.
La mayoría de las obras sociales costean estos problemas y también de la incontinencia de orina, otra cuestión que se trató en el curso.
Curso internacional
Este curso organizado por la Sociedad de Ginecología de Misiones contó con disertantes invitados de Bolivia, Venezuela, Perú, Ecuador, República Dominicana, México, Chile, Paraguay, y de la Argentina. Del Longo dijo que es el único lugar en la Argentina donde se realiza esta práctica a nivel mundial, es el sexto curso y ya han tenido 200 participantes que pasaron por el aula magna del Boratti.
