Lo afirmó el juez de familia, Roberto Nicolás Chemes quien consideró que las modificaciones se dan en buena hora “porque el derecho tiene que seguir los pasos que sigue la sociedad en general”. Además, se mostró en desacuerdo con quitar la causalidad de divorcio y con que se regulen los vínculos de concubinato porque “el que decide tener este vínculo no quiere ser regulado”.
El magistrado expresó su satisfacción por las modificaciones propuestas y dijo “nuestra legislación en materia de derecho de familia y todo lo que gira en torno al matrimonio siempre estuvo atrasada respecto a otras legislaciones”.
Asimismo indicó que para la ley el matrimonio no es un sacramento sino un contrato y que las nuevas modificaciones implican un avance, por ejemplo, en la posibilidad de convenir un régimen patrimonial. “Ahora un bien comprado por ambos estaría en condominio y no como un bien conyugal, que implica una división en partes iguales en caso de divorcio”. Al respecto expresó “me parece acertado que el divorcio sea rápido y escrito y que recaiga en la cabeza de uno de los cónyuges ya que antes, cuando no se llegaba al común acuerdo había que recurrir al divorcio contencioso y peleado”.
Por otro lado indicó su desacuerdo con algunas modificaciones como que desaparezca la figura del abogado “porque es un buen consejero y puede vislumbrar ciertas cosas, en todos los casos la presencia de un abogado es necesaria y es conveniente”, que se eliminen las causales de divorcio y que se regule el concubinato.
En ese sentido subrayó la importancia de las causales y explicó “por ejemplo, cuando un cónyuge atenta contra la vida del otro o sus hijos tiene que ser causa de divorcio, o si comete injurias gravísimas al otro porque se proyectan económica y moralmente al otro cónyuge” y agregó “además, si se le quita la causación también desaparecería el adulterio y si desaparecen todas esas causas se estarían afectando los intereses morales, personales y económicos de uno de los cónyuges”.
Por último consideró que la pretensión de regular el concubinato constituye un error “porque el que decide tener ese vínculo no quiere ser regulado, el que elige el concubinato elige una libertad total”.
(FM Nación)
