La procesión con la imagen de San José fue alrededor de la plaza 9 de Julio.
Con la asistencia de muchos fieles que colmaron la explanada de la Catedral, el obispo de Posadas, Juan Rubén Martínez presidió la misa en honor a San José en la noche del lunes. En su homilía, el Obispo dijo que el «Señor invita a los cristianos seguir el camino de la fe, un camino que no promete que todo será fácil». Habló de la opción de «perdonar si estamos peleados con el otro, perdonar por la fe y el evangelio que uno cree, dar yo el paso para reconciliarme con el otro». Al finalizar la misa, y ante la ausencia de cadetes de la Policía como era habitual, los fieles cargaron el Santo Patrono y con cantos y vivas realizaron una procesión alrededor de la plaza 9 de Julio, que culminó nuevamente en la Catedral, donde el Obispo realizó la bendición a los presentes.
La solemne misa comenzó a las 19, en la explanada de la Catedral donde se erigió el altar, presidido por la imagen de San José, santo patrono de Posadas, y considerado esposo de la Virgen María.
El obispo Juan Rubén Martínez estaba acompañado del párroco padre Alberto Barros, sacerdotes y laicos de la Diócesis.
Asistieron autoridades municipales, concejales, delegaciones de colegios, representantes de comunidades parroquiales y público en general.
En parte de su homilía, el obispo Martínez decía: «Y para ser felices la fe es exigente, pero no nos pone espejitos falsos delante que nos van generando como satisfacciones inmediatas, que de alguna manera aparecen, pero rápidamente se nos escabullen de las manos, y nos dejan sin nada, espejitos mentirosos, sabemos que el Señor propone un camino exigente que implica opciones, a veces morir algo para poder vivir algunas opciones que son necesarias para que nosotros tengamos vida, para que amemos de verdad».
El prelado destacó que «la fe es un don que se va curtiendo en la cotidianeidad, en la vida diaria, y cuando decimos esto tenemos hay que mirarlo a San José que vivió tantos años en Nazareth, no sabemos demasiado de él, son pocas sus presencias, no tenemos palabras de él pero tenemos su compromiso, fue un hombre de fe que miró profundo y entendió la voluntad de Dios, no tuvo una mirada superficial de la realidad, la mirada de la fe profundiza el acontecimiento y hace entender lo profundo de la realidad».
Dijo a la feligresía que hay que pedir «al Señor que nos regale el don de la fe, los cristianos de hoy que estamos celebrando San José en el mismo lugar que se viene celebrando aquí hace tantos años, ojalá podamos renovar nuestra fe, decirle que sí al Señor y comprometernos en un sí en la cotidianeidad, en la esperanza, en las cruces, en los gozos, no renunciar, no morir en estas opciones que vamos realizando y poder vivirlas con fe, una fe madura y Pascual».
«Pidamos al señor madurar la fe con nuestros compromisos, acciones y nuestros criterios».
Hogar de noche para chicos
Por su parte, el padre Alberto Barros agradeció la presencia de los concurrentes, y entre otras cosas recordó que originalmente Posadas se llamaba Trincheras de San José, pero «por cuestiones de la política y la historia fue cambiado».
También agradeció la posibilidad de que estén funcionando dos albergues para personas sin recursos, impulsados por la comunidad de la Catedral y con apoyo municipal, al tiempo que anunció la creación de un tercer hogar en poco tiempo, que será destinado a chicos de la calle.
Dijo que acción social de la Municipalidad censó “20 chicos que duermen en la plaza o en las calles de Posadas, y muchos con problemas de ruptura familiar, adicciones, entre otros”. Agradeció a los que hacen posible estos centros para personas carentes.
