Traerán testigos con la Policía por el crimen de Javier Pauluk

Lo afirmó el juez de la causa, Marcelo Cardozo. El magistrado dijo que en febrero estaban dispuestas varias testimoniales, pero las más importantes no se hicieron por falta de testigos.

El juez de Instrucción Nº1 de Posadas, Marcelo Cardozo, indicó a Misiones On Line que en el transcurso de este mes hará traer por la fuerza pública a varios testigos que había citado en el mes de febrero de este año. Según el letrado, los que podrían ser los más importantes, no se presentaron en la Justicia después de varias notificaciones.

El ingeniero en informática fue asesinado de cuatro balazos en marzo de 2009 y pese a que hubo varios detenidos en diferentes momentos, ahora la causa navega en un mar de incertidumbres y sin pistas firmes.

Casi a fines de febrero de este año como había adelantado Miriam Pauluk, hermana de la víctima, estaba previsto la declaración de varios testigos que ya habían estado en la causa como tales, sin embargo el juez encargado  indicó que los que considera que pueden ser los más importantes no se presentaron ante la requisitoria. 

Por este motivo, Cardozo traerá por la fuerza pública a los que resistieron a la citación. El expediente cuenta con muchas fojas y lleva más de 3 años sin pistas firmes. Los últimos tres detenidos fueron en enero de 2011, pero después se les dictó la falta de méritos y la causa volvió a quedar prácticamente en cero.

 

El hecho por el que se pide justicia

El 10 de marzo de 2009 la Policía encontró a Javier Pauluk con cuatro balazos dentro de un automóvil. Fue  en las calles Buenos Aires y Catamarca de Posadas. Un lugar tan céntrico como transitado a excepción de aquella mañana de viernes santo. Nadie vio nada, o al menos nadie se ha presentado a decirlo, salvo un último testigo a principios de enero de 2011, quien dijo que había visto ese día a un joven oriundo del barrio A3-2 por la zona, el día del crimen con “guantes y un arma de fuego”.

Justamente ese joven fue uno de los últimos tres detenidos en la causa. De todas formas, aquel sospechoso, de apellido Miranda, al igual que otros dos, fueron quedando en libertad porque el magistrado les dictó la falta de méritos y sus detenciones no parecían tener relación con el sangriento crimen ocurrido hace más de 3 años. 

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