Repetirán operativo para erradicar el mosquito transmisor del dengue en Iguazú.
El ministro de Salud pública, Oscar Herrera Ahuad aseguró que «estamos sin circulación viral en la provincia de Misiones, el último caso notificado de dengue era importado y fue en junio del año pasado, estamos con la vigilancia a pleno, con notificación de todos los pacientes febriles». Agregó que se acentuará la tarea porque está complicado en países vecinos como Brasil y Paraguay, con más de un millón de casos en esos lugares, por lo que Salud pública de la Provincia profundizará acciones en otro operativo el lunes y el martes. Al respecto «ayer se me informa que el vicepresidente Boudou estaría viniendo para compartir con el Gobernador de la provincia y el ministro de Salud de la Nación las acciones en conjunto, similares a las ya realizadas en Iguazú», dijo Ahuad.
Contó que desde el lunes están haciendo el operativo de prevención del dengue en Puerto Iguazú. Al respecto recordó indicó que la persona tiene que entender que si hay un criadero de larvas en su terreno, afecta también a los vecinos. Dijo que nunca tuvieron inconvenientes para trabajar en los domicilios.
Respecto a la enfermedad en sí, indicó que cuando el paciente tiene fiebre de origen desconocido el médico debe pedir los estudios correspondientes. (Fuente: Radio República).
Por otro lado, el director de Epidemiología de Salud Pública de la Provincia, Julio Estévez aclaró, en diálogo con Cadena Express, que “hubo un solo caso en Iguazú cuyo cuadro febril coincidía con la posibilidad de que fuera dengue pero no está confirmado, si bien pasó los primeros análisis de laboratorio faltan las segundas pruebas de para verificarlo”.
Asimismo consideró que en Iguazú el dengue siempre es el punto crítico porque es lugar más expuesto a la zona de alta incidencia de patología como son los casos de Paraguay y Brasil, fundamentalmente por el gran movimiento de personas a uno y otro lado de la frontera.
En ese sentido aseguró que se vienen realizando actividades intensas desde el año pasado que se intensificaron desde el comienzo de la época estival y que han seguido y se han incentivado sobre todo desde hace diez días con la venida del ministro de Salud Pública de la Nación y el ministro de Defensa, quienes lanzaron la campaña conjunta de actividades con las fuerzas armadas y de seguridad para la prevención del dengue, como el descacharrado, el control y la eliminación de posibles focos de anidación de larvas.
Por otro lado, Estévez se refirió a la leishmaniasis y remarcó la importancia de que los profesionales médicos estén atentos a la detección lo más precozmente posible de casos sospechosos para poder confirmarlos o descartarlos y hacer los tratamientos.
“Esto va a seguir ocurriendo, solo queda estar atentos y ajustar la precisión diagnóstica, no hay mucho más que hacer. Los profesionales médicos deberían estar suficientemente alertados en la posibilidad de esta enfermedad y tener presente la posibilidad de los diagnósticos diferenciales con los niños respecto a otras patologías porque los síntomas no son exclusivos de la leishmaniasis y entonces ahí es donde se puede dificultar el diagnóstico” dijo al respecto.
Indicó asimismo que la larva de la leishmaniasis habita en zonas de abundante hojarasca y en ambientes de humedad y sombra como baldíos o lugares con mucha vegetación y donde hay mucho acumulo de materia orgánica a nivel piso.
Por último, se refirió a los casos de leptospirosis en la provincia y señaló que se trata de una enfermedad infecciosa producida por un tipo de microbio que se llama leptospira y del cual hay numerosas variedades. “Es una enfermedad de la que ya han aparecido casos en Posadas y Garupá, también en la zona del Alto Paraná en años anteriores. Eldorado es donde hay antecedentes más antiguos de la enfermedad”, señaló.
En cuanto a las causas de la enfermedad indicó que lo más probable es que estén vinculadas a los roedores, que si están infectados depositan -al orinar o defecar- los microbios en las superficies que la gente toca, contaminándolas. La enfermedad tiene un período de incubación de una o dos semanas con síntomas como fiebre aguda en su primera fase, dolores corporales o manifestación de malestar general, conjuntivitis, e incluso pequeñas excoriaciones en la piel. “Si no es detectada tiempo, la leptospirosis puede producir muerte” remarcó Estévez.
