Comprar moneda brasileña se ha convertido en un problema para los misioneros que pretenden pasar sus vacaciones en Brasil. Afirman que no es conveniente llevar pesos.
Las limitaciones a la compra de moneda extranjera que puso en marcha la Afip para controlar la compra de dólares, se convirtieron en un problema para muchos de los misioneros que pretenden vacacionar en las playas brasileñas este verano. Ocurre que el sistema informático de control montado por el organismo recaudador impide a muchos de ellos comprar reales.
El economista Gerardo Alonso Schwarz, indicó que quienes se encuentren en esa situación pueden superarla por dos vías: “por un lado, la compra de paquetes se hace en pesos en Argentina, con eso se soluciona la mayor parte de los gastos; la otra opción es retirar directamente el dinero de los cajeros automáticos en Brasil. Uno tiene que fijarse cuál es la red de bancos que tiene cada tarjeta de débito y tendrá que buscar un cajero de la misma red, en la ciudad donde esté vacacionando”, indicó.
“Con esa acción se pueden retirar reales, eso sí, el cajero cobrará como comisión cerca de 4 dólares por operación, por lo que conviene hacer la menor cantidad de transacciones o consultas. Siempre los usuarios van a tener el límite que hay en cada extracción en la Argentina. También con esa tarjeta de crédito o débito se pueden hacer compras en Brasil”, detalló.
“Los que llevan pesos en efectivo a Brasil tienen que tener en cuenta que según la cotización oficial que existe del peso en Brasil, vamos a tener un tipo de cambio similar al de la Argentina, pero la verdad es que las casas de cambio en las ciudades veraniegas utilizan algo que se llama dólar o peso paralelo, que si bien es reconocido por los bancos de Brasil, es superior al tipo de cambio al cual se comprarían los reales en un banco importante en una ciudad capital en Brasil, o en Argentina”, detalló.
