La pequeña de 11 años fue intervenida con éxito en el Hospital Garrahan hace una semana. Su madre contó que se recupera favorablemente, con muchas ganas de volver a Posadas para reunirse con su familia y amigos. Misiones es la primera en el país en diagnósticos de cardiopatías pediátricas reveló el médico y especialista Lisandro Benmaor.
Keila Luque de 11 años recibió hace una semana el regalo más hermoso que existe en el mundo, un corazón para seguir viviendo. La niña oriunda de Posadas padecía de una cardiopatía desde abril de este año y fue transplantada con éxito en el Hospital Garrahan de Buenos Aires. Su historia es alentadora respecto a los demás pacientes que están en lista de espera y un mensaje de esperanza para quienes aún esperan recibir un órgano. Misiones es la primera en el país en diagnósticos de cardiopatías pediátricas según confirmó el reconocido cardiólogo Lisandro Benmaor, referente del Garrahan en Misiones y el titular de la red provincial para tratar este tipo de enfermedades.
Milagro de Navidad
«Los médicos me decían que me preparara para cualquier cosa porque Keila estaba muy mal, y yo no paraba de llorar. Pero en una semana el doctor vino y me dijo que habían donado el corazón y no lo podía creer», relató Gladis Luque, madre de la niña. Asimismo contó que su hija ingresó al quirófano a las 5.30 de la mañana y salió pasadas las 12 del mediodía. En comunicación con Radio Libertad contó que en abril su hijita comenzó a padecer una cardiopatía.
«La trataron en Posadas y después le derivaron al Garrahan para control, después volvimos porque se complicó y decían que tenía el hígado con líquido y debía seguir un tratamiento. Todo ese tiempo fue una angustia para mí y ella que sufría mucho, vomitaba, no podía comer, estaba mal, con bajo peso, deshidratada, y bueno, le pedí tanto a Dios por mi hija, y después un momento entró en terapia intensiva, los médicos me decían ‘mamá, mirá, prepárate para cualquier cosa’, porque Keila estaba muy mal. Hoy le agradezco a Dios por este milagro».
La donante fue una niña de Buenos Aires, cuyos riñones fueron para un paciente de córdoba. «Yo sé que tuvimos suerte, porque hay otras dos niñas acá que llevan una un año y otra 8 meses esperando y siguen en la misma. Ella entró a quirófano a las 5.30 y salió a las 12.45, yo estuve todo el tiempo en el pasillo. Vi cuando vino en la ambulancia», relató.
Hoy Keila está super feliz y según su madre, activa y sin ningún dolor. «Hasta ahora va evolucionando muy bien gracias a Dios, está perfecta, se levanta, camina, los médicos están asombrados porque ella evoluciona de maravilla. Ya se quiere ir», sostuvo Gladis y agradeció a todo el equipo médico tanto de Posadas como de Buenos Aires que hicieron posible que su hija siga viva.
Sin perder tiempo
Lisandro Benmaor, reconocido cardiólogo y referente del Garrahan en Misiones, destacó la celeridad con la que se realizó la intervención luego de que la nena estuviera dos días en lista de espera nacional. Reveló que la provincia lidera el diagnóstico en Argentina de cardiopatías con cerca de 900 casos por año, mientras que la media nacional es de 400 casos.
«En Misiones se está trabajando en una red donde los médicos se comunican entre sí cuando se detecta un caso, si es necesario practicar alguna cirugía se realiza o si no se activan los mecanismos para la derivación al Garrahan, en avión sanitario. Nosotros buscamos una red de cardiología infantil donde cualquier chico de la provincia que necesite atención esté contenido. El hecho de que en Misiones todavía no se hagan cirugías cardíacas de alta complejidad obliga a agudizar el diagnóstico que muchas veces se hace con ecografías intrauterinas», contó. Confirmó que se trabaja para que en un futuro próximo estas cirugías se realicen en Misiones.
