El Inym formalizaría la semana próxima un pedido de incremento en la estampilla para financiar los aportes a los trabajadores. El acuerdo permitiría a los productores desentenderse del pago de aportes por los tareferos que empleen.
El convenio de corresponsabilidad gremial para el sector yerbatero ya está cerrado y sólo falta establecer una fecha para su firma. Se trata de un esquema en el cual los aportes por jubilación, obra social, seguro de riesgos de trabajo y asignaciones familiares, surgen de un monto fijo que se cobra sobre el precio del producto elaborado. De ese modo, el productor queda liberado de la responsabilidad de pagar aportes patronales por los tareferos que emplee. El convenio debe ser firmado antes de fin de año, ya que ello permitiría ingresar a un régimen en el cual la Nación cubre el 50 por ciento de las cargas.
Pretenden que el aporte fijo sea de 40 centavos por kilo de yerba elaborada y que ese dinero surja de un incremento en el valor de la estampilla del Inym, aunque para ello sería necesario el visto bueno del ministerio de Agricultura de la Nación.
El exsubsecretario de Trabajo de la Provincia, Juan Carlos Agulla, explicó que el nuevo sistema permitirá que los alrededor de 7.000 tareferos que trabajan en negro, se incorporen al empleo formal a partir de la próxima zafra gruesa, que comienza en marzo.
El flamante diputado provincial resaltó que lo más importante es firmar el convenio antes de fin de año y aclaró que luego hay tiempo para ajustar los aspectos técnicos.
De dónde surgirá la suma fija que reemplazará a los aportes patronales y la jubilación, es un tema que todavía está en discusión. Una de las posibilidades, planteada recientemente por el gobernador Maurice Closs, es recurrir a un incremento de 40 centavos en la estampilla que cobra el Inym. El representante de la Provincia en dicho instituto y recientemente designado titular del Ifai, Ricardo Maciel, indicó que la semana próxima el directorio se reunirá para acordar el pedido de incremento.
Pero el tema deberá ser resuelto por la Nación, que en oportunidades anteriores se mostró reticente a una suba en la mencionada tasa, dado que ello implica un incremento automático en el precio de la yerba en góndola.
El directivo de la Cooperativa Piporé, Raúl Karaben, opinó que la aprobación del convenio de corresponsabilidad gremial “es lo mejor que nos podría pasar. En el Inym hace tres años creamos una subcomisión del régimen de corresponsabilidad gremial. Discutimos entre el sector patronal y obreros la forma de crear un sistema que permita poner un precio diferencial que libere al productor de pagar aportes y contribuciones. El sindicato de obreros rurales hace mucho que lo viene pidiendo”.
El representante de Piporé estimó que 40 centavos por kilo sería suficiente para blanquear a los trabajadores. “Si lo multiplicamos por la cantidad de kilos que se vende por año al mercado interno, alrededor de 230 millones de kilos, estamos hablando de 90 millones de pesos, cifra que alcanza para cubrir aportes. Hoy el sistema no recauda más de 25 millones cuando debería recaudar 90 millones, eso da una magnitud del negreo”.
