Al menos dos proyectos de ley generados en el Congreso de la Nación apuntan a elevar el control sobre los recursos naturales, en especial el agua, que debería ser potestad de los estados provinciales.
Al menos dos proyectos de ley generados en el Congreso de la Nación apuntan a elevar el control sobre los recursos naturales, en especial el agua, que debería ser potestad de los estados provinciales.
Así se deduce del análisis de la iniciativa “Ley de presupuestos mínimos para la protección ambiental de los acuíferos naturales existentes en territorio argentino” originada en la conocida diputada Victoria Donda del sector Libres del Sur que integra el Frente Amplio Progresista.
En este caso, no sólo da injerencia a la Nación en lo que tiene que ser gestionado por las provincias –por artículo 124 de la Constitución Nacional- sino que otorga superpoderes al Ombdusman nacional. “El Defensor del Pueblo de la Nación, a instancia de la Secretaria de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable, podrá solicitar a la autoridad judicial competente la suspensión preventiva de toda actividad que pusiere en riesgo cierto e inminente el desarrollo sostenible de los acuíferos naturales existentes en el territorio Argentino”, propone en su artículo 6.
Para más adelante puntualizar. “La Secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación será autoridad de aplicación de la presente ley” (art. 7).
Para la legisladora (hija de desaparecidos nacida en 1977), “el presente proyecto de ley tiene como objeto establecer principios generales de protección sobre los acuíferos naturales existentes en la república Argentina, declarándolos reserva natural hídrica de la Nación”. Más claro, echarle agua.
Desde el Código Civil
En el segundo caso, se trata de una iniciativa originada en la diputada fueguina Liliana Fadul que propone algunas modificaciones al Código Civil
Así, en el inciso 2 del artículo 2340 de dicho código propone que:
“Artículo 2340: Quedan comprendidos entre los bienes públicos: (…) 2º. Las aguas, sus márgenes, cauces, lechos, zona peri glaciar o contenidas en encerramiento natural o artificial, al igual que toda agua en estado sólido, líquido, gaseoso que tenga o adquiera la aptitud de satisfacer usos y derechos de interés general, incluyendo las aguas subterráneas; sin perjuicio del ejercicio regular del derecho del propietario del fundo de extraerlas en la medida de su interés, limitado al desarrollo sustentable de su heredad y con sujeción a las restricciones impuestas por la legislación específica;
Más adelante, en su fundamentación la legisladora especifica el sentido de estos cambios que se propone cinco medidas clave. Y la primera de ella queda evidenciada.
a. La recategorización del agua como bien de DOMINIO PUBLICO DEL ESTADO (nacional) por lo que, en consecuencia, se deberá entender que la satisfacción del interés general comprende desde las actividades contemplativas, recreativas, deportivas, científicas y hasta de navegación, comunicación, producción, industrialización, entre otras.
Y agrega: “Respecto a su condición jurídica, el bien agua conforme a su naturaleza e independientemente de ser considerado por accesión un bien mueble o inmueble, reviste un fin superior cual es: ser parte inescindible del hombre -es un elemento vital- y, por lo tanto, del bien común. Por lo que su afectación al dominio público y el resguardo previsor para el cumplimiento del derecho al agua que, como derecho humano reviste, hace que la condición, categorización y diversidad de situaciones en la que fue contemplado en la antigüedad, deba ser hoy revisionado, en aras de la paz social y de la Soberanía Nacional”.
Los conceptos locales
Jorge Galeano, titular de Aguas Misioneras Sociedad del Estado enfatizó el papel de ejercicio de la soberanía que conlleva la creación y puesta en marcha de esta empresa.
“Se trata de una política de Estado que tiende al uso de los recursos naturales en bien de los misioneros. Nos encontramos ante la primera provincia argentina que plantea una reivindicación de sus recursos naturales, que le corresponden por la Constitución nacional y por las leyes. Así el Código Civil y la Constitución Nacional”, indicó.
“Y lo importante –agregó- desde el punto de vista la política de Estado, es que es trata de un acto de soberanía. Cuando le entregué al presidente de la Legislatura Carlos Rovira la primera botellita de Agua de las misiones terminada, él la tomó, se le dibujó una sonrisa en su rostro y la llevó al lado de la estatua de Andresito Guacurarí. Y dijo unas frases que recuerdo claramente: “No te felicito: te recontra-felicito”. Fue y la puso al lado de Andresito. “Es un acto de soberanía”. “Y es así porque Misiones se hace cargo de sus recursos. Se ejerce la verdadera propiedad posesión y uso de sus recursos. No damos a particulares”.
“Todas las provincias que tienen empresas privadas metidas en sus territorios y que sacan el agua (Entre Ríos, entre ellas que tanto va con el tema ambiental) con una marca premium y se trata de una firma privada. Y nadie dice nada. Y acá, toda empresa que use el agua subterránea, se lo estará sacando a la gente, a los misioneros. Es un recurso que en realidad es del Estado.
En ese sentido, consideró que la iniciativa misionera de prosperar en el resto del país, no traerá mucho apoyo de compañías internacionales muy grandes que operan en el mercado.
“Y sí, ellos no están interesados en que esto prospere. Vamos a tener enemigos y muy grandes. Porque el concepto políticamente es pesado”
Al sostener que “los misioneros, cada día, nos vamos autodeterminando más y cuidamos nuestros recursos naturales”, el gobernador Maurice Closs exhortó a “contagiar una vez más el sentido misionerista, como se logró con el voto a las Cataratas del Iguazú, y salir a pedir y comprar el Agua de las Misiones. En el hogar, hoteles, restaurantes y todos los comercios deben priorizar y promocionar este producto que es nuestro”, puntualizó.
En particular, se refirió al surgimiento de la iniciativa en un mercado cautivo a nivel mundial entre dos grandes grupos “Danone” y “Nestlé” que con el paso del tiempo “han logrado monopolizar la producción en gran escala, en un segmento al que ahora se sumó Misiones”.
El presidente de la Legislatura, Carlos Rovira: «No tengo dudas de que el mundo ya está asistiendo a una nueva época muy similar a la de la conquista del descubrimiento de América, donde nosotros somos los nuevos indígenas de tierras riquísimas en las nuevas riquezas del futuro, una de ellas es el agua y no sea cosa que de nuevo se vuelva al truque, ahora en vez de cambiar el oro y los minerales preciosos, les regalemos a los nuevos colonos que van avenir a colonizar (esto no es ni profecía ni nada) los colonos ya no van a pertenecer a países, sino a empresas financieras que ya saben la importancia estratégica del agua, por eso están comprando tierras húmedas, el caso de… por ejemplo aquí muy cerca y que está vinculado al acuífero guaraní: los Esteros del Iberá. Los Esteros del Iberá no por casualidad todo el borde es de un americano y esto es una realidad. Un americano que no es un hombre cualquiera, es un hombre estudioso, muy preparado, pertenece algunos círculos ecologistas, pertenece a un grupo muy selecto en Estados Unidos cuyo presidente, es el ex secretario de Estado, lo cual se plantearon también desde una óptica netamente privada pero ideológica, a hacer inversiones en el medioambiente. Entonces, primero para satisfacer de agua y otros elementos naturales a su comunidad, eso no está mal. Lo que está mal es que la postura pasiva que adoptamos muchas veces o de oponernos simplemente porque es un extranjero y no hacemos nada por nosotros mismos”. Entonces es un poco la idea con esto romper el falso de tener que defendernos o que nos invaden. Acá no va haber una invasión inglesa ni de nadie, tenemos que defendernos nosotros mismos cuidando lo que tenemos. No se puede querer algo y después defender que se desconoce, entonces a partir de un fuerte conocimiento del agua, en todos los aspectos, no solo vamos a estar protegiéndonos sino posibilitando a las futuras generaciones que sí van a disponer hasta de un banco de agua, se está hablando de crear hasta créditos y bonos de agua y bancos que en vez de manejar billetes o bonos buenos o basura, manejen bonos de agua que son activos. Esto se mide con sistemas actuales muy modernos. Esos son los nuevos activos, las nuevas reservas del futuro ya no van a ser ni oro, ni euros, ni dólares sino la cantidad relativa de recursos naturales como el agua”.
