A 7 de cada 10 embarazadas no les controlan la salud mamaria

Según un estudio de Lalcec y el Hospital de Clínicas, aunque se desconoce, es una etapa de la vida femenina en la que aumenta el riesgo .

En la gran mayoría de los casos, el embarazo es una buena noticia para las mamas. Es que algunas de sus alteraciones benignas más frecuentes, por ejemplo las displasias, mejoran.

Sin embargo, y debido a una exacerbación de las hormonas ováricas y de la prolactina, otra hormona que es secretada por la hipófisis, a lo largo de la gestación, el posparto y la lactancia aumenta también la probabilidad de que se desarrolle un cáncer de mama.

«No es frecuente, puede producirse aproximadamente en una de cada 100 embarazadas, pero hay que tenerlo en cuenta porque, de presentarse, es un verdadero «incendio», un tumor de crecimiento muy rápido, por la gran actividad hormonal de esa etapa», afirma el doctor Florentino Sanguinetti, jefe del Servicio de Patología Mamaria de Lalcec y director del Programa de Detección de Cáncer Mamario que esa institución realiza en todo el país desde hace 12 años financiado por la firma Avon.

Sanguinetti apunta que a lo largo de esos nueve meses, la atención está puesta casi excluyentemente en la evolución de la gestación.

«En un trabajo que realizamos en Lalcec con el Hospital de Clínicas, interrogamos a un grupo de embarazadas: 7 de cada 10 indicaron que durante la gestación no les habían controlado las mamas ni les habían preguntado sobre su situación mamaria», recuerda el especialista. Y enseguida agrega: «El momento de la vida en que más hay que controlar la mama es durante el embarazo y generalmente ocurre lo contrario». 

Con cada consulta

La recomendación vigente es que en cada consulta con el obstetra sean revisadas las mamas.

«Si aparece alguna lesión, por ejemplo edemas, tumefacciones, induraciones (durezas), o si un pezón que era normal se muestra invertido, hay que consultar inmediatamente con el mastólogo -detalla el doctor Sanguinetti-. La ecografía es buena y no emite rayos. Pero, con protección especial, también puede hacerse una mamografía. Y ante la menor duda, se debe realizar una biopsia por punción, dirigida, con todas las medidas de seguridad. No es posible mandar de nuevo a su casa a una paciente en la que observamos algo fuera de lo común: si existe un tumor mamario será de un desarrollo mucho más violento, agresivo y rápido.»

Es que el reconocido especialista de Lalcec explica que si, en líneas generales, un tumor mamario se duplica cada 90 días, «durante el embarazo lo hace en 45 días. Es decir, en la mitad de tiempo». 

Cambios hormonales

¿Y hay mujeres con más o menos riesgo que otras de desarrollar la enfermedad? «Sí -responde Sanguinetti-. Son las que tienen antecedentes familiares de cáncer de mama y aquellas con patologías mamarias previas, como, por ejemplo, nódulos sólidos o enfermedades de los conductos. Pero el control debe ser para todas y continuar luego del embarazo.»

Explica que con el parto aparece una nueva hormona, la oxitocina, que estimula la lactancia, pero al mismo tiempo mantiene el estímulo hormonal. «La lactancia es muy favorable, disminuye mucho el riesgo futuro de desarrollar cáncer mamario y cuanto más prolongada, mejor -señala-. Lo que aconsejamos siempre es que se prolongue todo lo posible. Pero no hay que descuidar los controles porque la mama recobra su riesgo habitual una vez finalizado el amamantamiento.»

El experto aclara también que si bien un cáncer mamario durante el embarazo no es, por cierto, la mejor de las noticias, hoy en día en la gran mayoría de los casos se puede seguir adelante con la gestación sin que el tratamiento comprometa el embarazo. 

La consulta aún sigue siendo tardía

El programa de Lalcec-Avon lleva 12 años recorriendo pueblos y ciudades sin mamógrafos ni acceso a la atención de la salud mamaria. «Ya controlamos 104.000 mujeres y hallamos 500 tumores muy pequeños en pacientes aparentemente sanas, que se han curado. Esa mujer, que muchas veces vuelve a un rancho, no sabe qué hacer y debemos procurarle la atención que necesita», dice el doctor Florentino Sanguinetti. Pero esa deficiencia no se limita a lugares sin acceso a la atención: «En Lalcec, plena ciudad de Buenos Aires, aún hacemos diagnósticos que en la mayoría de los casos son de estadío 2, cuando lo deseable sería el estadío 1 (tumor de menos de 2 cm, no diseminado). Es decir: las mujeres siguen llegando tarde a la consulta mamaria». 

(lanacion.com)

 

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas