lo hicieron ayer durante todo el día. Amenazan con profundizar la protesta en los próximos días. La protesta se mantuvo desde el mediodía hasta las 22:00. El tránsito se interrumpió por lapsos de dos horas, con 20 minutos de tregua. Piden 1.600 pesos para cada puestero.
Los puesteros de la Placita del Puente volvieron ayer a ser los dueños de viaducto que une a Posadas con Encarnación. Mantuvieron interrumpido el tránsito durante diez horas, desde el mediodía hasta las 22:00, con interrupciones de 20 minutos cada dos horas. Reclaman que la Entidad Binacional Yacyretá (Eby) los indemnice por las pérdidas que, según afirman, sufrieron a causa de varias inundaciones producidas desde 2009 hasta la fecha. Responsabilizan a la Eby porque afirman que el predio en el que fueron ubicados, no ofrece defensa contra las inundaciones. Anticiparon que habrá más protestas en los próximos días.
El secretario general del gremio de vendedores ambulantes, Alberto Fusté Padrós, quien también representa a los puesteros, recordó que el reclamo es para que les paguen 50.000 pesos por cada puesto por pérdidas sufridas desde agosto de 2009, hasta la entrega de la nueva Placita del Puente.
Afirmó que en los últimos tres años se produjeron 18 inundaciones que provocaron el deterioro o destrucción de alrededor del 20 por ciento de las mercaderías almacenadas en los puestos de venta.
Sin trabajo
Además de las pérdidas de mercaderías, Padrós aseguró que las crecidas impidieron trabajar a los puesteros durante muchos días, lo que les provocó quebranto por lucro cesante.
Reconoció que las autoridades locales de la Eby, con quienes hablaron el último jueves, están haciendo algunas obras para disminuir los daños en caso de próximas inundaciones y que se pueda acceder al predio, como dos escaleras y elevación del piso para que puedan ingresar los autos, instalación de baños porque en la última inundación el agua arrastró los baños químicos que había y de más bombas con protección para evitar que se llenen de basura.
“En las actuales condiciones es imposible seguir trabajando, estamos en medio del agua y del barro. Mientras que el nuevo centro comercial al que tenemos que ser reubicados hace tres meses debía estar concluido, pero apenas están en sus inicios”, explicó.
