Música y danza, terapias alternativas que se disponen para el bienestar físico y espiritual

López Vinader propone sonidos únicos e irrepetibles con una variedad de instrumentos atípicos.

López Vinader propone sonidos únicos e irrepetibles con una variedad de instrumentos atípicos.

La musicoterapia se aplica para la rehabilitación y promoción humana, y la danzaterapia, para soltar las emociones negativas y armonizarse. En Posadas hay especialistas en impartir estas técnicas, destinadas a personas que buscan el bienestar físico y espiritual. La musicoterapia por ejemplo beneficia a niños con capacidades diferentes, acompaña a niños internados, mujeres embarazadas, pacientes con diálisis, entre otros. En cambio la danza grupal es buscada por mujeres mayores que desean pasar un momento de alegría y, compartir experiencias para seguir adelante con la vida.

La musicoterapia, qué es?

La musicoterapia tiene amplias definiciones, según la directora internacional de Musicoterapeutas para la Paz, María Elena López Vinader. Es una profesión del área de la salud que nació en 1945 después de la segunda guerra mundial en Estados Unidos y después se extendió en distintos lugares del mundo. En la Argentina comenzó en el año 1961.


Explicó que «es una ciencia y un arte, una ciencia porque se basa en la medicina y las ciencias sociales, la antropología, psicología y todo lo que se relacione con el conocimiento del ser humano, y es un arte porque hace falta de la música, nosotros utilizamos el sonido, la música y todos sus elementos como un lenguaje de comunicación verbal y por eso tiene tanta fuerza sobre todo para niños o adultos que les cuesta verbalizar, y también para personas que no han tenido oportunidad de conocer y expresarse a través de la música, le da la oportunidad de que puedan crear su propia música”.


López Vinader señaló que la musicoterapia se aplica en el área de rehabilitación y promoción humana, en Buenos Aires «muchos hospitales ya tienen musicoterapeutas, sobre todo niños, y en Posadas sólo hay en algunos centros de rehabilitación privada», agregó.


Es master en Musicoterapia de la Universidad de Nueva York. Ha trabajado como musicoterapeuta en el departamento de Neurociencia en el Hospital de New Jersey, y en una escuela de niños carenciados en el Bronx.


También trabaja con la mujer embarazada, pacientes en diálisis, y «hasta la última fase antes de morir, porque uno de los primeros órganos que se desarrolló es el oído y el último en irse también es el oído, una persona que está en coma, a no ser que tenga deficiencia auditiva puede escuchar”.

 

Los instrumentos que utiliza para las terapias tienen sonidos diferentes, únicos e irrepetibles. Ellos son el xilotón o marimba (tiene otra escala distinta al xilofón), kalimba, cuencos tibetanos, el «toc toc» australiano, un tambor con sonido de las olas del mar; maracas en forma de manzana,,  arpa automática o cítara, además del piano con el cual cualquier persona puede tocar sin saber.

 

 

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