Estaba previsto que este miércoles se evalúen los daños ocasionados en las pasarelas que conducen a Garganta del diablo, pero no se pudo llevar adelante esta acción porque si bien el río empezó a bajar, todavía no ha descendido lo suficiente.
El circuito que conduce a Garganta del diablo en Cataratas fue clausurado el viernes pasado por seguridad de los visitantes, ante la inminente crecida del río Iguazú, producto de las intensas lluvias en Brasil y Misiones.
Días después de haberse cerrado este circuito, se desprendieron algunas pasarelas que conducen a Garganta, hoy estaba previsto realizar la evaluación de los daños y ver con exactitud cuántas pasarelas habría que reponer.
Pero el río Iguazú no ha dado tregua, y hoy se registraron 9 mil metros cúbicos por segundo en Cataratas (lo normal es 1.800). Por esa razón no se concretó el análisis de las pérdidas y se pasará para cuando el río descienda más, según lo que informaron desde Iguazú Argentina, la empresa concesionaria de los servicios en el Parque.
En tanto que desde el Parque Nacional Iguazú explicaron que “cuando las represas de Caxias del lado brasilero abren sus compuertas, en 8 horas esas aguas llegan aquí en Cataratas, y siempre se realiza un monitoreo y se trabaja para prevenir daños en la infraestructura de las pasarelas. En este caso, la concesionaria de los servicios en el Parque está trabajando para normalizar lo antes posible esta situación, que se estipula que si el río baja, a más tardar en 48 horas, estaría normalizado y accesible a los turistas para que puedan acceder al circuito de Garganta”.
Por su parte, Prefectura de Iguazú adelantó en diálogo con Misiones On Line que el río ha comenzado a bajar lentamente, la altura hoy (miércoles por la noche) es de 23 metros estacionado y en el puerto de Andresito se registró 3,80 metros bajando.
