FESTIVAL INTERNACIONAL DE TÍTERES KRUVIKAS 2011
La primera obra provino de Kenya. Pura conciencia ecológica en clave swahili
ÁFRICA ABRIÓ EL TELÓN
La historia de Libendi, un monito valiente que intenta, sin éxito, combatir la falta de agua y alimentos, abrió el telón del festival de títeres más importante de la región.
Kenya es un país del oriente africano que se encuentra por sobre la media del continente en todos los aspectos socioeconómicos; pero su vecino, Somalia, es uno de los países más pobres del planeta y se halla inmerso en una caótica hambruna que tiene en inminente riesgo de muerte por inanición a más de la mitad de la población. Tamaña crueldad fue el disparador para que los Krystall Puppeteers, con más de 15 años sobre las tablas, decidieran realizar una obra que trate de formar conciencia acerca de la gravedad de la situación y de la necesidad de cuidar el agua y combatir el calentamiento global.
Los “titiriteros de cristal” llegaron hasta el Centro del Conocimiento gracias a la buena predisposición de Catalinas Sur, la veterana compañía de títeres del barrio de La Boca, que los trajo a nuestro país para un festival en Buenos Aires. Así se logró extender la gira y llegaron hasta Santo Tomé (Ctes.) y Sáenz Peña y Resistencia (Chaco), y relataron que ya en sus inicios siempre intentaron crear conciencia acerca de la dura realidad social que atraviesa el continente negro. Así fue como el HIV, el hambre o la caza ilegal fueron temas recurrentes en sus obras.
Pero, ¿cómo es trabajar con niños de culturas tan diferentes como la africana, latinoamericana y europea –los Krystall Puppetters realizan periódicas giras por el Viejo Continente-? Christine, con un español bastante claro para un africano, nos respondió que “a la hora de ver o manipular un títere, los niños son iguales en cualquier parte del mundo y todos se asombran y disfrutan”, pero recalcó que las reacciones son bien diferentes de acuerdo al entorno de cada uno. “En África los niños son muy disciplinados porque allí no existe el individualismo a esa edad. los chicos miran muy atentos y se ríen cuando la obra dice que hay que reírse y se callan cuando hay que escuchar. En Latinoamérica, en cambio, conocimos una niñez mucho más fuera de control, pero en un buen sentido, y son los maestros los que imponen el orden. Son como los hinchas de soccer –futbol–”, agregó en medio de risas. ¿Y en Europa?, “en Europa los niños son mucho más difíciles de tratar, en España, por ejemplo, nos robaron un muñeco y parte de la escenografía”.
LA OBRA
La sabana africana se encontraba poblada por muchos animales hasta que un día los ríos se secaron. Así Libendi, un mono muy valiente, decide dejar su región para aventurarse en busca de agua. Su recorrido lo lleva muy lejos de sus amigos, y cuando está a punto de llegar a un río salvador, muere de hambre y sed. Dos cebras encuentran el cuerpo y hacen correr la voz. Así Libendi termina convirtiéndose en un héroe para todos los animales, y gracias a su determinación todos entendieron que es necesario pelear por cosas buenas aunque nos cueste la vida. Cuando los animales comprendieronn el mensaje lloraron de felicidad y sus lágrimas se convirtieron en un caudaloso río que devolvió la vida a la sabana, y así lo bautizaron con el nombre de nuestro héroe, el río Libendi.
Si querés ver la obra completa hacé click acá http://www.youtube.com/watch?v=AIvyaLdE7IY&feature=player_detailpage
Público: todas las edades. Duración: 45 min. Aprox.
Idioma: castellano
Técnica: títeres de mesa y marionetas
¿CUÁNDO VERLA?: Martes 18:30 hs, Viernes 09:30 hs y Sábado 16:30 Hs.
¿Dónde?: Sala Tempo, (Tres de Febrero casi Córdoba)
