El reconocido médico otorrinolaringólogo, Mauricio Yankelevich, jefe de ese servicio en el hospital Madariaga y el sanatorio Nosiglia, explicó en el programa La mesa Grande que se emite por Radio Libertad, Radio República, Del Sol y Antena Uno, mas una veintena de radios del interior, que el ronquido: “es un drama social, el tema ha traído hasta problemas de discriminación. Hubo gente que echada de hoteles porque molestaban a otros pasajeros por ej. es un problema que aqueja a gran parte de la sociedad”.
“Es un ruido que se emite por procesos respiratorios obstructivos, el problema se da en un porcentaje más alto en los hombres. Pueden hacer ronquidos desde chicos, porque al nacer no tuvieron los orificios nasales bien desarrollados, lo mas común en los chicos de 2, 3 o 4 años, es el agrandamiento de las adenoides o carnosidades de la nariz, ese chico además tiene las amígdalas agrandadas. Otra de la causa en los chicos es la alergia, la rinitis, la obstrucción casi permanente. En los chicos al extraerle las adenoides o las amígdalas posiblemente al darle mejor ventilación, al quitarle esa obstrucción, ya no ronque”.
“En adolescentes y jóvenes un factor causante puede ser los golpes que se dan en la nariz, jugando, o desviaciones del tabique, entonces eso causa obstrucciones en la respiración nasal que provocan la respiración por la boca y por ende se ronca”.
“En el adulto puede ser el exceso de peso, el alcohol, la insuficiencia respiratoria nasal, los psicofármacos que producen la relajación total del cuerpo en las noches”.
“Si el ronquido cada vez se hace mas grave, entramos en lo que se llama apnea del sueño, que produce la falta de entrada de oxígeno al cuerpo y que puede llegar a despertar incluso al roncador, esa apnea puede traer problemas cardiacos”.
“Hay tratamientos que disminuyen en alto porcentaje el ruido de los roncadores, hay que estudiar al paciente, ver cuales son las causas, luego del diagnostico directamente se pueden hacer tratamientos paliativos, o pasar a la fase quirúrgica que consiste en disminuir el tamaño de los cornetes de la nariz, o corregir los tabiques desviados, por ejemplo”.
