Distintos recortes

Escribe Juan Carlos Argüello, jefe de Redacción de Misiones On Line 

“La economía moderna es dirigida. O la dirige el Estado o la dirigen los poderes económicos. Estamos en un mundo económicamente organizado por medidas políticas, y el que no organiza su economía políticamente es una víctima. El cuento de la división internacional del trabajo, con el de la libertad de comercio, que es su ejecución, es pues una de las tantas formulaciones doctrinarias, destinadas a impedir que organicemos sobre los hechos nuestra propia doctrina económica”. El análisis, de Arturo Jauretche viene a cuento de la visita de Aníbal Fernández, el jefe de Gabinete que presentó en Posadas su libro Zonceras Argentinas y otras yerbas, inspirado en el pensador argentino y con la idea de recrear el debate de un pensamiento nacional que trascienda la duración de un gobierno. Que se vuelva a militar, pidió Fernández. En un partido político, en la iglesia o en el club de barrio. Pero pensando en el otro y en el bien común.

El pensamiento de aquel, profundamente nacional pero lejos de la estigmatización del otro, -Jauretche decía que lo nacional es lo universal visto por nosotros- es la base sobre la cual Fernández busca desmitificar algunas zonceras que se repiten sobre los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner.

Pero sobre todo, unirnos en un solo objetivo, sin importar los orígenes. Es lo mismo que decía Jauretche: Todos los sectores sociales deben estar unidos verticalmente por el destino común de la Nación (…). Se hace imposible pensar la política social sin una política nacional.

La línea de pensamiento está en el mismo rumbo elegido en Misiones en 2003. Dejar de pensar en la Provincia como mera espectadora de la realidad nacional y, con sus aciertos y errores, buscar la propia identidad.

Así se pusieron en marcha diversos objetivos con Carlos Rovira primero y ahora Maurice Closs en el Gobierno, como el autoabastecimiento, el regreso a las chacras y el incentivo del Estado a la inversión. “La economía en manos de los políticos”, definió hace unos días el presidente de la Cámara de Diputados.

Pero esa definición choca con el interés lógico de quienes ejercen el poder paralelo y hasta no hace mucho, principal. El poder económico no quiere desprenderse de sus privilegios, que están más allá del interés colectivo.

Ese poder lo ostentan grandes empresarios, banqueros, lobbystas y por encima de todos, la especulación financiera. Ese round está abierto y lejos de tener un ganador, tendrá una definición recién en los comicios de octubre. Pero sea cual fuere el resultado, no será el fin de la guerra, sino apenas una batalla.

Queda claro que lejos se está de alcanzar  un objetivo unificado para los argentinos. Más allá de los discursos de cotillón electoral, la definición de bien común es distinta según quién la exprese.

Siguiendo la tónica, Jauretche consideraba a la política nacional como aquella que buscaba el bien del país, que no era otro que el bien de la mayoría, que en la Argentina son los sectores populares.

El modelo vigente desde 2003 le ha devuelto visibilidad a esa mayoría, con la recuperación del empleo, que se tradujo en caída de la pobreza y medidas que aliviaron la crítica situación social.

Hay candidatos que hacen otro recorte de la realidad. Mano dura piden algunos, gobernar con consenso, dicen otros.

El radicalismo sorprendió con un claro “mensaje para los mercados”, según definió Angel Rozas la incorporación de Javier González Fraga a la fórmula con el hijo del primer presidente de la recuperada democracia.

El vuelco a la derecha del radicalismo es una señal de la confusión opositora en su búsqueda de derrotar a la alianza que tejió el Gobierno con la mayoría popular.

Ricardo Alfonsín descartó al socialista Hermes Binner como aliado -como en Misiones la UCR relegó al PS- y tras cartón anunció su acuerdo con Javier González Fraga, economista, columnista de La Nación y ex presidente del Banco Central en dos períodos durante la presidencia de Carlos Menem.

Peronista, su pasado con el riojano no lo transformó en menemista y coqueteó con ser candidato de Eduardo Duhalde y hasta ministro de Economía del presidenciable Roberto Lavagna e incluso ocupó un cargo con el kirchnerismo.

Sí es afecto a las definiciones tajantes. “Alfonsín tiene todas las capacidades para dar la batalla que hay que dar para restablecer los valores republicanos en nuestro país. Este tema es más grave que cualquier otro aspecto económico: cambiar el estilo de gobierno y respetar las instituciones”, aseveró. Mercados, valores republicanos, estilo. La otra cara de la gran mayoría.

Hay quienes sospechan que detrás de Fraga se esconde Eduardo Duhalde y el bonaerense alimentó esa percepción al anticipar que votará a Alfonsín en un eventual ballotage -para el que se descarta-.

Al armado se sumó ayer Francisco De Narváez, quien será candidato a gobernador por Buenos Aires. Lejos quedó la UCR de su tradición socialdemócrata y ahora pretende representar el espacio de centroderecha que no logró consolidar a un representante que impacte en las chances electorales del oficialismo.

Lo peor es que plantean las elecciones como una compulsa con “el kirchnerismo” y no como la posibilidad de generar una propuesta alternativa. Es en contra de.

Este armado cuenta con los votos de Capital Federal de la mano de Mauricio Macri, pero el reinado PRO tal vez no sea tan firme y la fórmula Filmus-Tomada o Pino Solanas lleguen a frenar su intento de reelección.

La Presidenta todavía no definió si va a ser la candidata, pero Aníbal Fernández advierte que “no hay otro remedio para los argentinos” que el hecho de que sea reelecta porque “el país no puede volver a quedar en manos de improvisados”.

El quilmeño apeló a la terminología popular de “cuidar los garbanzos” para explicar la necesidad de continuidad del modelo que cumplió ocho años el 25 de mayo.

Hasta ahora las encuestas le dan la razón. Los principales consultores otorgan a Cristina una ventaja casi inalcanzable para sus rivales. En Misiones, los sondeos que se manejan la muestran muy arriba.

Una revela un 75 por ciento de imagen positiva entre quienes consideran que su gestión es muy buena o buena y el 56 por ciento de los consultados la votaría, contra apenas un once por ciento por Alfonsín y un seis por ciento por Duhalde. El 78 por ciento cree que ganará.

La misma encuesta realizada en Posadas también indica una muy alta aceptación del Gobierno provincial con una distancia nunca vista entre quienes votarían por la reelección de Closs y una oposición que apenas alcanza al diez por ciento de la intención de voto y los partidos tradicionales relegados. Los encuestados valoran fundamentalmente la obra pública como generadora de empleo y motor de la economía, la buena gestión, el apoyo al turismo y al agro y la producción.

En la capital provincial el escenario se repite en cuanto a la ventaja de la Renovación sobre los candidatos de la oposición, con un claro recorte de preferencias entre Joaquín Losada y el intendente Orlando Franco por sobre los demás candidatos, aunque, según otros sondeos, todavía hay un 20 por ciento de indecisos.

La Renovación parece marchar con tranquilidad hacia el 26 de junio, más allá de los avatares propios de tiempos electorales.

El principal conflicto se concentra en un sector gremial docente, que sostiene medidas de fuerza pese a que hasta sus aliados volvieron a dialogar con el Gobierno. Es que las soluciones se encuentran allí y no en los cortes de ruta. Cinco de los seis gremios de la Mesa de Diálogo impulsaron -y aceptaron- modificar la grilla por antigüedad como mecanismo para elevar el salario con equidad, mientras que el piquetero serial y candidato a intendente Rubén Ortíz insiste en una fórmula que no haría más que profundizar desigualdades: volcar cien pesos al básico tendría un impacto de poco dinero en el bolsillo de quienes menos ganan, pero de más de mil pesos en cargos jerárquicos. En cambio, la modificación de la grilla por antigüedad garantiza como herramienta inicial, un incremento parejo que achatará la pirámide entre los mejores y más bajos sueldos. De cualquier modo, la amplia mayoría de los docentes está en las aulas y apenas un puñado plantea el desafío desde un piquete, en las últimas horas vigilado de cerca por un grupo antimotines de la Gendarmería.

Es distinta la relación con el sector productivo, donde el respaldo volcado en los últimos años rinde sus frutos. Las chacras están produciendo como nunca y es en el interior donde más se palpa el respaldo a las políticas provinciales. El encuentro nacional de Ferias Francas que culmina hoy en el Centro de Convenciones es apenas una muestra de la riqueza de la chacra. Dulces, carne, embutidos, artesanías. Todo bien misionero. Mezclado con lo traído por otros que transitan por el mismo camino en otras provincias. Todo marca nacionl.

 

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas