Empató 1-1 como local ante Fulham y quedó a diez puntos del líder, Manchester United. Tevez y Zabaleta fueron titulares.
El abucheo que despidió al equipo fue un claro mensaje. Manchester City dejó pasar una buena oportunidad para arrimarse a la punta, la que está en manos de Manchester United, su clásico rival. Flojo partido del equipo conducido por el italiano Roberto Mancini. Fue 1-1 en casa ante el Fulham, un equipo que navega por debajo de la mitad de la tabla, por la 28° fecha de la Premier League.
El buen derechazo de Balotelli, a los 24 minutos, que sirvió para abrir la cuenta fue contraproducente para el City. Porque a partir de ese momento se nubló. Se olvidó todo lo bueno que había hecho. Y el partido cambió de mando. Tevez, desconectado, extrañó demasiado al español David Silva.
No sorprendió, entonces, el empate del Fulham. Gran contragolpe por la derecha que el experimentado Duff empujó a la red a los 3 del complemento. El City, obligado a ganar, fue con todo hacia adelante. Pero sin ideas. Tevez tuvo una clarita, a los 15. Pero el arquero del visitante le dijo que no. Zabaleta, que actuó por el lateral izquierdo, pasó al ataque pero sólo aportó barullo. Abundó el individualismo. Y la victoria quedó lejos.
Fue empate. Y desilusión. Porque Manchester City quedó a diez puntos del líder, Manchester United, que tiene un encuentro pendiente. Quedan diez fechas para el final del torneo y la sensación que es los de Mancini le dijeron adiós al campeonato.
