La definición de los precios de la yerba se encamina de nuevo al laudo

Ayer se realizó la segunda reunión de la concertación de precios del Inym. Las posturas se mantuvieron muy alejadas, lo que imposibilitó la llegada de acuerdo. Hay pocas esperanzas de conseguir resolver la cuestión dentro del instituto. La Provincia y la producción acordaron pedir una suba de más de 50%, pero la industria quiere mantener los valores actuales.

Poner de acuerdo a los representantes de los diferentes eslabones de la cadena yerbatera respecto a cuánto deberían valer la hoja verde y la yerba canchada durante la próxima zafra de invierno parece, nuevamente, una tarea poco menos que imposible. Como viene ocurriendo en las últimas sesiones de precios del Instituto Nacional de la Yerba Mate (Inym), los productores y secaderos pretenden llegar a un valor que les permita afrontar los costos de esas actividades (lo que requeriría un sustancial incremento respecto a los valores en vigencia), mientras que desde la industria se niegan a autorizar aumentos importantes porque, según argumentan, la Secretaría de Comercio de la Nación les impide trasladarlos al precio final de la yerba elaborada. Así planteadas las posturas, la reunión realizada ayer, la segunda en el marco de la sesión de precios, pasó a un cuarto intermedio hasta el próximo martes.
Puestas en números, las diferencias entre los sectores son enormes. Buena parte de las asociaciones de productores y el Gobierno de Misiones presentaron una postura conjunta en la que consideraron que el precio del kilo de hoja verde debería ser de 1,20 pesos, lo que representaría una suba de más de 50 por ciento respecto a los 78 centavos vigentes.
De su lado, los industriales repitieron el planteo según el cual no estarían en condiciones de prestar su acuerdo a un incremento sustancial en los valores de la materia prima, porque desde la Secretaría de Comercio Interior ya les habrían anticipado que no permitirían una suba superior a siete por ciento en los precios del producto elaborado, lo que impediría a los molinos afrontar un incremento superior a ese porcentaje en los valores que pagan por la materia prima que procesan.
La postura de 1,20 pesos por kilo de hoja verde fue acordada en una reunión en la que participaron los dirigentes del sector productivo Juan José Szychowski, Hugo San, Norberto Hein, Hector Barrios, Guido Lagier, Bonifacio Flores, Carlos Montero, Rosana Argüello, Martín Julio Tonn, Juan Dimitrowicz, Carlos Ortt, Alicia Hlum y Jorge Hadad y el representante de la Provincia en el Inym, Ricardo Maciel.
Lo resuelto en esa reunión, que según afirmaron los que asistieron es el resultado final de más de un año de trabajo que incluyó profundos análisis de costos, fue plasmado en un acta que fue elevada al directorio del Inym.  “Después de  un amplio debate, se llegó a consensuar el costo por kilogramo de hoja verde puesta en secadero para la zafra marzo-septiembre de 2011, considerando para ello las diferentes formas de producción y comercialización que realizan los productores. El costo a partir de las variables mencionadas es de 1,20 pesos por kilogramo”, afirma el documento.
El representante de Misiones en el Inym se ocupó además de relativizar el argumento que presentaron las industrias. Consideró que si los molinos presentaran una postura unificada y “se plantaran” frente al secretario de Comercio, podrían levantar más los precios del producto elaborado y trasladar los beneficios al resto de la cadena.

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