El acuario de Oberhausen informó que no hará más predicciones, tras acertar 8 en Sudáfrica. «Se jubila, les da las gracias a todos”, dijo la vocera de Sea Life.
Se terminó el Mundial, hay campeón, y Paul, el pulpo, la mascota no oficial de Sudáfrica 2010, se retiró con un asombroso cien por cien de efectividad en sus predicciones. La ahora estrella del Sea Life de Oberhausen no volverá a hacer predicciones y su retirada quedó rodeada por la curiosidad del mundo entero, que debate dónde está el truco sobre sus aciertos.
Según anunciaron los responsables del acuario de Oberhausen donde Paul pasa sus días, no habrá más pronósticos del cefalópodo. Ni consagrará sus tentáculos a estimar resultados electorales ni se pondrá de nuevo al servicio del fútbol, siquiera para la próxima Eurocopa. «Se jubila, les da las gracias a todos. Fue un Mundial fantástico», expresó Tanja Munzig, vocera del Sea Life.
«Se retira con un mensaje de profundo agradecimiento hacia todo el mundo», dijo Munzig. «A pesar de la avalancha de consultas que le están llegando desde todo el mundo, ya no tendrá que volver a decidir entre dos cubos plásticos», subrayó.
Ocho aciertos sobre ocho partidos en el Mundial, incluida la final de España frente a Holanda, forman un currículum impresionante, que han dado al pulpo una resonancia mediática jamás alcanzada por ningún representante del mundo animal.
Paul, deslizando sus tentáculos por los contenedores con su banderita interior acapararon la atención de todo el planeta, inclusive países que no contaban en la disputa del Mundial. Solo quedaron incógnitas acerca de su talento como oráculo (¿cómo fue? ¿fue su cuidador el verdadero oráculo? ¿hay algún truco con los colores de las banderas o con su ubicación?
