Los precios aumentaron 60% respecto al año pasado. Por la suba del azúcar en góndola, aseguran que el escenario es bueno apuntar al mercado interno. El objetivo es llegar al autoabastecimiento. Apuntan a incrementar la productividad.
La cuenca cañera guarda fuertes expectativas en la presente zafra, que ya comenzó tímidamente y se espera que cobre fuerza en los próximos días. Se estima que la producción de azúcar triplicará a la del año pasado y se procura llegar en los próximos años a los máximos históricos alcanzados por el Ingenio San Javier en los 70. Los precios de la caña aumentaron 60 por ciento respecto a 2009. Apuntan al autoabastecimiento.
El intendente de San Javier, Rubén de Lima Natividade, destacó que la actividad consiguió reponerse rápidamente de la pobre cosecha del año pasado. Estimó que este año se elaborarán alrededor de 4 millones de kilos de azúcar, lo que representa un incremento de más de 300 por ciento respecto al volumen alcanzado el año pasado.
Con el incremento que se proyecta alcanzar este año, la cuenca cañera dejará atrás la pobre campaña de 2009 y volverá a producir a niveles similares a los de años anteriores, aunque lejos todavía del récord de 9,5 millones de kilos alcanzado en 1974 en el ingenio de San Javier.
El aumento de la producción se logró gracias a un incremento en la productividad y de la superficie cultivada, que según indicó de Lima Natividade, llega a las 1.000 hectáreas, distribuidas entre alrededor de 130 productores en 11 municipios.
Las condiciones actuales del mercado interno, signado por una fuerte alza en los precios del azúcar común, representan un escenario favorable para aumentar el volumen producido en la provincia. Atento a esta circunstancia desde la Provincia apuestan a incrementar la superficie cultivada y mejorar la productividad de los cañaverales existentes.
El objetivo es ocupar la totalidad de la capacidad instalada de la planta industrial de San Javier, que hace décadas funciona por debajo de su potencial por falta de materia prima.
Para lograr ese objetivo, el intendente de la localidad del sur misionero sabe que será fundamental garantizar la rentabilidad del pequeño productor, porque de otro modo el colono se volcará a otros cultivos.
Opinó que con el incremento de precios de alrededor de 60 por ciento alcanzado este año, que elevó a 150 pesos la tonelada de azúcar orgánica y a 130 la de azúcar común, valor al que en ambos casos debe sumarse un plus por dulzura, se está consiguiendo incentivar al colono al cultivo de la caña.
Cambio de rumbo
Hasta ahora la mayor parte de la producción de azúcar de Misiones es orgánica y apunta al mercado externo. Se estima que 75 del azúcar que se elabore este año corresponda a la variedad orgánica y el 25 restante a la convencional.
Conforme a la política de autoabastecimiento de alimentos que vienen llevando adelante la Provincia y aprovechando el aumento de precios del mercado interno, en los años venideros se buscará cultivar más caña convencional para atender la demanda provincial.
Se espera que el cambio de rumbo también beneficie al productor, ya que si bien la variedad orgánica tiene mayor valor por tonelada, la convencional ofrece mejores rindes. Una hectárea de caña orgánica rinde 40 toneladas, mientras que una de la variedad convencional, 70. A valores actuales, una hectárea orgánica deja alrededor de 6.000 pesos al final de la zafra y una convencional, unos 9.000.
El mayor rinde de la variedad convencional responde en gran medida a que resulta más fácil y económico fertilizar ese tipo de cañaverales, ya que se pueden usar productos químicos, mientras que en los orgánicos se deben usar productos naturales.
