Portugal mostró su gran potencial ofensivo y le aplicó una goleada histórica por 7-0 a la débil Corea del Norte, que sólo logró sostener el ritmo durante los primeros 45 minutos y ya quedó afuera. Meireles, Simao, Hugo Almeida, Tiago (2), Liedson y Ronaldo marcaron para los europeos.
Los dirigidos por Carlos Queiroz exhibieron una contundencia letal en Ciudad del Cabo y dieron un gran paso hacia los octavos de final, instancia donde llegarán inclusive si pierden con Brasil y Costa de Marfil no golea a los norcoreanos. En tanto, el récord de goles en un partido mundialista sigue en poder de dos encuentros: Yugoslavia 9-0 Congo (Alemania 1974) y Hungría 10-1 El Salvador (España 1982).
Como marcaban las especulaciones previas, Portugal asumió el monopolio de la tenencia de pelota y exhibió una postura decididamente ofensiva. Sin embargo, los lusitanos no pudieron combinar ese despliegue con precisión y quedaron presos del hermético esquema defensivo de los norcoreanos. Cristiano Ronaldo y Simao se pararon como extremos para desbordar, pero se diluyeron con el correr de los minutos. Portugal generó peligro con tiros desde afuera del área y lo bailó a un equipo coreano muy limitado.
El telón se bajó en medio de aplausos para la gran producción futbolística de Portugal en el segundo capítulo. La goleada revitalizó la esperanza de los portugueses, que ya saborean los octavos de final.
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