El intendente de Oberá, Edwaldo Rindfleisch confirmó que en el marco de la Fiesta Nacional del Inmigrante, además del subsidio de 1 millón de pesos para la reconstrucción del edificio municipal, el Gobierno le otorgó un cheque por el convenio de salud con esa localidad, para enfrentar a la problemática de la trata de personas y el tráfico de bebés.
El intendente de Oberá, Edwaldo Rindfleisch.
El jefe comunal explicó en radio Libertad 92.5 que «con Oberá se da una situación distinta a las otras localidades donde también existe el problema de trata y venta de bebés, pero se sabe que en mi localidad está el foco principal de estos delitos».
Rindfleisch precisó que con el fondo del convenio de salud, que además será destinado al sistema sanitario de Oberá, se conformará un equipo interdisciplinario de profesionales para abordar la trata de personas y el tráfico de bebés «que era un deuda pendiente en este municipio, porque en lo que hace a otras problemáticas sanitarias, ya lo habíamos resuelto en conjunto con el ministro de Salud, José Guccione».
Satisfacción tras el cierre de la Fiesta del Inmigrante
Por otro lado, el jefe comunal mostró su conformidad tras el cierre de la Fiesta Nacional del Inmigrante, y dijo que «siempre es un esfuerzo pero también es el placer del reconocimiento de aquellos que visitan a Oberá, porque se encuentran con un espacio cultural gastronómico que no se lo esperaban».
Año a año el evento va creciendo en cuanto a la diversidad de visitantes, y al respecto Rindfleisch opinó que «la fiesta ha tomado una dimensión nacional y es bueno que vengan gente de afuera poorque quedan más recursos para el municipio».
