Proteccionistas y funcionarios correntinos coinciden en que el avance de la leishmaniasis debe ser atacado, no obstante, «el modo» de hacerlo ha causado controversias: ¿qué hacer con los animales, potenciales portadores?. En Brasil, donde una vacuna preventiva para el caso circula hace años esto ya no pareciera una incógnita, según publica el portal Momarandu.
Se tata de «Leishmune», la primera vacuna del mundo contra la Leshmaniose Visceral Canina, ya comercializada, de manera controlada, a médicos veterinarios de áreas endémicas de Brasil.
Su productora es la Fort Dodge, la quinta mayor fabricante de productos de salud animal del mundo, ligada a la división veterinaria del grupo farmacéutico Wyeth, un coloso del género.
La vacuna, fue desarrollada por investigadores de la Universidad Federal de Río de Janeiro. Para lograrla la profesora Clarisa Palatnik de Souza y su equipo del Instituto de Microbiologia de la URFJ dedicaron 24 años de estudios intensivos.
¿El resultado?
El medicamento ofrece entre 92% y 95% de protección a los animales a los que se aplica, lo que le ha valido en 2003 el permiso del Ministerio de la Agricultura de Brasil para su producción industrial y venta.
La vacuna es obtenida de una glicoproteína existente en la membrana del protozoario leishmania capaz de estimular la producción de anticuerpos. La Leishmune es una vacuna altamente purificada, y su producción es bastante compleja.
Su uso es exclusivo para médicos veterinarios y debe ser aplicada en perros sanos a partir de los cuatro meses de edad en tres dosis con intervalos de 21 días. Los investigadores recomiendan además una vacunación anual.
Leishmaniasis
La leishmaniasis es una enfermedad zoonótica causada por diferentes especies de protozoos del género Leishmania, que invade diferentes órganos del perro provocando lesiones de diversa consideración, hasta provocarle la muerte. También afecta a humanos. Su sintomatología clínica es muy variada, pero son singulares lesiones en la piel, en articulaciones y, cuando ya avanzada, también a nivel renal. El parásito se transmite a través de un mosquito llamado flebótomo, que lo traslada con su picadura. Con la leishmania en su corriente sanguínea y piel, el perro se transforma en fuente de infección para los mosquitos, que, por su parte, pueden contaminar otros perros y seres humanos.
Emergencia
A raíz del caso de leishmaniasis detectado en el barrio Popular, el Concejo Deliberante declaró la semana pasada a la Ciudad de Corrientes en Emergencia Sanitaria por un año, dictamen con el que autoriza a la Dirección de Zoonosis a utilizar el sacrificio de animales infectados
La norma autoriza a los agentes municipales dependientes de la dirección de Zoonosis a recurrir a métodos no dolorosos para sacrificar a los animales que constaten con pruebas de laboratorio que han sido infectados con la enfermedad.
