La gravedad de la denuncia acaparó la atención del auditorio cuando se señaló que las investigaciones concluían en la «existencia de una red de prostitución que tiene su ramificación hacia los empleados de Botnia, en Fray Bentos». La Asamblea Ciudadana Ambiental de Gualeguaychú sesionó anoche en el Centro Cultural Sirio Libanés donde se abordaron diversos temas aunque la atención de los asambleistas se desvió ante una grave denuncia que formuló Meyi Carrazza, del Centro de Estudios Interdisciplinarios sobre la Mujer (CEIM) sobre la existencia de una red de prostitución hacia Botnia.
Carrazza narró que estuvieron investigando la red de prostitución que se ejerce hacia Botnia desde provincias como Misiones y Entre Ríos, relato que fue corroborado también por el testimonio de varios asambleístas, según UNO.
La gravedad de la denuncia acaparó la atención del auditorio cuando Carrazza señaló que las investigaciones concluían en la «existencia de una red de prostitución que tiene su ramificación hacia los empleados de Botnia, en Fray Bentos».
En ese sentido explicó que «se ha constatado el ejercicio de la prostitución cuyos clientes son los empleados de Botnia en Fray Bentos» y que «la frontera, especialmente en Colón-Paysandú es porosa y pasa cualquiera», según el sitio oficial de la Asamblea «No a las papeleras».
