La medida fie acordada ayer, entre directivos de la empresa Pastas Celulósicas Piray (PCP) y representantes del sindicato que nuclea a los trabajadores industriales de la compañía. Los trabajadores de la planta celulósica de Puerto Piray, quienes están de vacaciones obligadas desde el primer día del corriente mes, deberán ahora enfrentar una suspensión sin goce de haberes por un plazo de siete días.
La medida fie acordada ayer, entre directivos de la empresa Pastas Celulósicas Piray (PCP) y representantes del sindicato que nuclea a los trabajadores industriales de dicha compañía.
Según indicó Mario Escurra, secretario general del gremio, los trabajadores aceptaron la medida a sabiendas de que la situación económica de la empresa que administra la planta es delicada.
El sindicalista explicó que a partir de la crisis financiera internacional y fundamentalmente, desde la fuerte devaluación que experimentó el real, cayó notoriamente la demanda de celulosa u muy especialmente las compras realizadas por empresas brasileñas.
A pesar de que el panorama es poco alentador, Escurra confió en que «a partir del primero del próximo mes estaremos en condiciones de retomar las tareas. Aunque ello depende de la posibilidad de vender la pasta celulósica que la empresa tiene en stock», aclaró.
El sindicalista no descartó iniciar algún tipo de protesta si la planta no retoma su actividad luego de los siete días de suspensión.
El representante de los trabajadores de la planta de PCP indicó además que la empresa está pagando los sueldos en cuotas. «A los obreros que tienen sueldos más altos se les adeudan dos quincenas y una parte de la tercera, mientras que a los que cobran un poco menos, se les adeudan dos quincenas», detalló.
