Estilista denunció a sacerdote en ejercicio por abuso sexual infantil

Entrevista exclusiva: Jorge wells. El coiffeaur posadeño develó el secreto que guardó casi 18 años para proteger a su familia. También indicó que otros cinco niños fueron víctimas de esta situación. El peluquero dijo que intervinieron el cura y un ayudante en la historia de maltrato. El joven busca que cese este accionar delictivo.

El estilista Jorge Wells puso sobre el tapete su caso, para que no continúe el abuso sexual infantil.

El estilista Jorge Wells puso sobre el tapete su caso, para que no continúe el abuso sexual infantil.

En el marco de un programa de televisión, Jorge Wells denunció públicamente haber sido víctima de abuso sexual por parte de un sacerdote de la ciudad de Posadas, cuando tenía tan sólo 12 años.

En una entrevista con Misiones On Line, el joven estilista que ya tiene 30 años confesó el suceso lamentable que le tocó vivir.

Muchas víctimas han preferido guardar silencio sobre los presuntos abusos por temor o por vergüenza, pero el posadeño quiso compartir su experiencia para que se tomen recaudos en el tema y cese el accionar de sacerdotes que actualmente continúan en ejercicio y que podrían seguir sometiendo a menores a estos maltratos.

¿ Cómo fue y en que contexto se materializó el abuso?

Este cura daba misa, cerca de mi casa, éramos chicos. Yo vivía mitad del tiempo en Buenos Aires y mitad acá, y toda mi vida ha sido así, con mi profesión sigo haciendo lo mismo.

Y bueno tenía mi grupo de amigos de chico, teníamos doce años y andábamos por la zona de la avenida Corrientes, donde me crió mi abuela paterna, y tenía una perra que se llamaba Samanta y en ese momento tiene cría, cinco perritos, y en nuestra inocencia dijimos, vamos a llevar a bautizarlos, entonces mis amigos y yo agarramos los perros y los pusimos en un canasto y nos acercamos a la iglesia más cercana.

Ahí pedimos al cura y a un ayudante para bautizarlos, pero en la cabeza de un niño uno no sabe que eso no existe, y es allí que los seis amigos padecimos lo mismo, porque fue un episodio de manoseo y nos invitaron a cenar.

¿Intervino más de uno?

Si, el cura tenía un ayudante, que era la misma persona que lo visitaba de noche, que lo descubrimos tiempo después porque jugábamos en la plazoleta de enfrente a la parroquia, y veíamos que llegaba esta persona en una moto de noche.

Después con el tiempo también, como yo tengo una formación bastante clara de lo que era mi cuerpo, porque fui muy bien educado de chico, y se lo agradezco a mi familia y tenía muchas cosas en claro que mis amigos se ve que no.

¿Qué hicieron luego de que ocurrió esto?

En realidad, fue un abuso sexual infantil, porque nosotros éramos menores, de entre 10 y doce años, en mi caso el cura intentó llevarme al confesionario, inventando una historia, me armó toda una fantasía, y llegado al lugar me empezó a manosear. Yo conocía las partes de mi cuerpo y mis amigos del barrio parece que no tenían tanta noción, y salgo corriendo y se lo cuento a mi abuela. Ahí ella me explicó que era lo que me estaba pasando, y me di cuenta que era lo que me había imaginado en ese momento, dentro de mi inocencia.

Con el tiempo me entero, que uno de los chicos del grupo que era un chico lindo de ojos azules, rubiecito, me entero que este cura lo invitaba de seguido a cenar y le regalaba zapatillas y ropa y le contaba historias.

Y este amigo con el que me encuentro hasta ahora, que ya tenemos los dos 30 años, contando anécdotas me comenta que este hombre le ofrecía cosas a cambio de sexo.

Y para nosotros ahora es una historia graciosa, pero para otros no lo es.

¿Y con el resto de los chicos?

No tuve mucho contacto.

¿Cómo reaccionaron?

Cada uno tiene su historia muy guardada. Y si este amigo me comentó lo que siguió sucediendo, esto habrá llevado mucho tiempo, yo me fui a Buenos Aires y perdí contacto con ellos, pero ellos continuaron en el barrio.

Mi amigo lo cuenta como anécdota, pero no creo que sea tan lindo para todos.

¿Cómo reaccionó tu familia con el accionar de este cura?

Mirá te cuento, el secreto lo guardamos mi abuela y yo, fue a la tumba con ella y mi familia se está enterando ahora. Desde que saltó todo esto.

Lo que pasa es que a veces te hacen hasta sentir culpable, como lo hacen con las víctimas de violación.

Cada uno entiende como puede y lo procesa como puede.

Preferí el silencio para no lastimarlos y resguardarlos de alguna forma.

Lo que contaste puede servir para la sociedad y para la iglesia para replantear el accionar de sus sacerdotes…

Te voy a contar una historia, tengo un amigo en Grecia, el está en un seminario, y me cuenta que de noche, en el instituto para curas son más de 150, y me comenta que absolutamente todos, de noche, se juntan para ir a bailar a la ciudad, y van un barrio gay donde todos los chicos salen a bailar, y al otro día siguen sus clases, sus estudios, como si fuera que nada pasó.

Estás cosas la hacen todo muy oculto, pero es obvio que suceden, tampoco quiero meter a todos en la misma bolsa, pero esta es una historia que sirve justamente para ver y abrir los ojos y ver lo que está pasando con la Iglesia Católica.

En cuanto a lo que me pasó, siempre para ir a mi casa al trabajo, paso siempre por esta capilla, y veo mucha gente en la vereda y cada vez que paso me veo reflejado en cada uno de los chicos que veo, y me digo ¡por Dios esto debe seguir pasando y muchísimo, y nadie presta atención, es todo una hipocresía!.

Igualmente cada familia es un mundo aparte, pero considero que deben prestar mucha atención a los chicos que concurren a grupos jóvenes de iglesias católicas, a chicas, todos por igual, creo que es una responsabilidad de los padres y de las autoridades extra católicas, para que controlen esos tipos de cosas. Porque así como me ocurrió a mi, le puede estar pasando a mucha gente.

¿Te enteraste de algunos otros casos?

Hasta ahora no, pero mucha gente se acercó y se solidarizó. Pero lo que me preocupa lo que debe estar pasando con otros chicos, igualmente se que hay muchos que tienen mucho miedo. Pero si me entero de alguien que quiere denunciar, obviamente que me voy a mover y lo voy a ayudar.

Si alguien te pide que seas testigo o participes en alguna acción judicial. ¿Lo harías?

Pero por supuesto, sin ninguna duda. Pasa que no sé hasta donde sirve la denuncia, porque uno nunca sabe el poder que ejerce la Iglesia sobre todo. Avala campañas políticas, silencia todo, ya que incluso hay millones de casos silenciados en forma económica. En Buenos Aires todos los casos se taparon de manera económica.

¿Que fue lo que te llevó a contar lo que te pasó?

Lo que pasa que yo esperaba que mis declaraciones me encuentren de manera madura. También me dio mucha bronca que un par de curas estuvieran haciendo declaraciones sobre la unión civil de gays, que nos señalen a nosotros como personas anormales, entonces creía que era el momento de contar. Pero esto fue el detonante. No intento hacer catarsis, sino quiero me historia personal sirva de ejemplo para que estas cosas no vuelvan a suceder.

¿Es un trauma para vos?

Yo creo que no tengo miedo y sé que es un tema que causó mucha polémica el tema del abuso, que conté una historia mía personal que lo tenía muy guardada, no por temor, sino porque no venía al caso comentarlo. Porque no me servía ni a nivel personal, ni laboral comentarlo. No es un complejo, ni un secreto, que tengo que guardarlo muy en el fondo, no llegó a ser algo importante, pero es algo que ocurre el tema del abuso y más dentro de la iglesia católica. Además, vemos casos muy conocidos últimamente que están saltando a la luz, y que eso está bueno, y creo que lo que hice fue apretar el botón a raíz de mi tema que tuve de chico que fue el tema del abuso por parte de un sacerdote que está en ejercicio de su profesión. Soy conciente de lo que dije y lo hice con mucha responsabilidad. No muchos tienen el valor de poder contar una situación así, de confesar, contar y hacerlo público.

Para mí no es una frustración ni es un trauma. Pero esto no puede seguir sucediendo, hay que controlar, es algo que ocurre es algo real.

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas