Cultivos de yerba desarrollados por el Inta pueden rendir el doble

Con algunas variedades se obtendrían un promedio de 20.000 kilos por hectárea, en comparación de los 10.000 kilos que producen las plantaciones tradicionales. Desde 1992 se distribuyen en Misiones los cultivares mejorados.

En la constante búsqueda de tecnificar el agro misionero y ofrecer alternativas para apuntalar el crecimiento de las chacras, la Estación Experimental del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta), de Cerro Azul, realiza desde hace varios años innovaciones que permiten el mejoramiento de los cultivos tradicionales de la región.

Uno de los principales trabajos, es el desarrollo de nuevos cultivos de yerba mate, que poseen diferentes características que mejoran su productividad. En esa línea, diferentes variedades creadas por el Inta, pueden rendir el doble en comparación con las plantaciones tradicionales.

Actualmente, de los yerbales de la provincia se obtiene un promedio de 10.000 kilos de hoja verde, realizando los correspondientes trabajos de mantenimiento y con un bajo impacto de los factores climáticos. En las mismas condiciones, con los cultivares del Inta se pueden obtener cerca de 20.000 kilos.

«Las variedades que venimos desarrollando desde hace varios años pueden tener un buen rendimiento, pero este siempre puede variar, debido a que las plantaciones de yerba mate no son homogéneas. Por esta razón, en relación a su edad o el clima, pueden producir entre 14.000 y 26.000 kilos», explicó el ingeniero agrónomo, Sergio Prat Kricun, que desde hace varios años trabaja en el desarrollo de los cultivos en el Inta.

Ganando espacio

Desde 1992, el Inta viene distribuyendo en la provincia las semillas mejoradas de yerba mate, para realizar un recambio en las chacras. En esa línea, hasta la fecha hay cerca de 10.000 hectáreas cultivadas con la variedad biclonal, sobre 200.000 hectáreas de yerba existentes.

«Este es un número muy importante, porque a pesar de que solo representa el cinco por ciento de los yerbales existentes, de a poco la variedad se va insertando en las chacras. Hay que tener en cuenta que el cultivo tradicional dura varios años, por lo que los productores tardan en renovar sus plantaciones», aclaró Prat Kricun.

Opción para los productores

El Inta continúa desarrollando nuevos cultivos, para poder ofrecer a los colonos nuevas variedades que permitan apuntalar la tecnificación de las chacras.

«Buscamos que el productor tenga la posibilidad de elegir entre varios cultivares, que evalúen cual es el mejor. Nosotros tenemos un grupo de cultivos con muy buenas características agronómicas y de calidad industrial, lo cuál ofrece una importante variedad a los colonos», indicó.

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